Uno mas

Uno más.
Ana Francisco
Siento que ya se ha escrito todo lo que se puede escribir sobre vivir en el extranjero y sobre no estar en tu país. Pero aún así pretendo contar mi historia y cómo vivo yoesa experiencia, sin aburrir demasiado al lector. Supongo que debería advertir que todo esto tiene un gran sabor autobiográfico.
Comencemos. A la tierna edad de 5 años cuando tus padres te dicenque te vas a vivir a España para ti es simplemente una aventura, ni siquiera comprendes qué es España y no entiendes que se encuentra a 7000km de lo todo lo que conoces. Luego, a los 10 años vuelves aVenezuela y vas descubriendo cosas que de alguna manera pareces conocer de antemano. Te sientes en casa desde el momento en que aterrizas en Maiquetía.
El problema inicia cuando a los 14 años teregresas a España (parece que procedo de una familia de nómadas, lo sé). Ahora sí que conoces tu país, tu cultura, tu mundo. Comienzas a notar las diferencias. Ya no hay vuelta atrás… Ya te ha has dadocuenta de la brecha insalvable que hay entre ellos y nosotros, entre ellos y tú. No puedes evitar extrañar tu casa, tu comida, tu familia, tus amigos, tus colas, tu Ávila, tus playas, tu temperaturaideal todo el año, tus huecos en las calles y hasta tus malandros. No puedes evitar emocionarte cuando al caminar por estas calles de Madrid alguien pasa a tu lado y escuchas un “¡Chamo!”.Simplemente te provoca gritar y decirle “¡Yo soy una de los tuyos!”.
Sí, se extraña. Y no, creo que nunca te acostumbras a la distancia. Ni siquiera cuando lees las desgarradoras noticias sobre el país. Nisiquiera cuando todos te recuerdan lo afortunada que eres al no vivir lo que ellos deben vivir día a día. Ni siquiera cuando vuelves de vacaciones y todos te advierten que todo ha cambiado, “No es lamisma Caracas que dejaste hace 2 años”.
Pasar por todo esto me ha obligado a vivir distintas experiencias que me gustaría compartir. Desde momentos incómodos debidos a mala comunicación con los...