vega

Cuatro temas para reflexionar
sobre la práCtiCa profesional
del abogado

Diego Vega Castro-Sayán* y Fiorella Reyes Paredes**
Existe una percepción negativa en la sociedad con respecto a los
abogados. Es innegable. El presente artículo abarca distintos temas
que involucran la práctica profesional del abogado. Mediante este
trabajo, se comparte el resultado de muchas discusiones,diversos
debates y la exposición de ideas con alumnos de último año de la
carrera de Derecho. Este trabajo, por su dimensión, se presentará
en dos etapas. En la primera se abordarán temas relacionados con
los ámbitos laborales del profesional (abogados de estudio, empresa
y del sector público), los conflictos de interés, el secreto profesional
y la corrupción.

1 Introducción
Hace unosmeses un muy comentado artículo de Alfredo Bullard1
llamó la atención de los académicos y profesionales ligados al derecho.
Revista de Economía y Derecho, vol. 8, nro. 30 (otoño de 2011). Copyright © Sociedad
de Economía y Derecho UPC. Todos los derechos reservados.
* Abogado por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Candidato a doctor, Universidad
Politécnica de Cataluña (España).Egresado de la Maestría en Gobernabilidad, Universidad
San Martín de Porres (2009). Con estudios de especialización, Institute of Law Enforcement, The Center of American and International Law, California, Estados Unidos (2004);
University of Toronto, Canadá (2010). Ha sido asesor y directivo superior en el despacho
presidencial peruano. Se desempeña como profesor a tiempo completo de la Facultadde
Derecho en la Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas (UPC).
** Estudiante de último ciclo de la Facultad de Derecho de la Universidad Peruana de
Ciencias Aplicadas (UPC).

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revista de eConomía y dereCho

En “Sobre abogados, mercachifles y monopolios: educación legal y
libre competencia”, el autor presentó algunas ideas que provocaron
opiniones diversas (y acaloradasdiscusiones).
Comenzaba el artículo así: “Mis coleguitas abogados merecen,
lamentablemente, la fama que se han ganado. Pocas actividades económicas hacen tantos esfuerzos por crear barreras de acceso y privilegios que protejan su mercado y sus ingresos. Regímenes de colegiatura
obligatoria, donde la entrada al mercado está regentada por los propios
competidores (a través de colegios de abogados, así,como merecen
escribirse, con minúsculas), sin ofrecer ningún beneficio adicional: no
hay auténtico control ético, ni información útil, ni nada que ayude a
los usuarios a escoger mejor o a saber qué es lo que se contrata cuando
contratan a un abogado. Además establecen en sus códigos de ética
tarifas mínimas de honorarios, en un cartel cuyo desparpajo para violar
las normas de libre competenciaes solo superado por su ineficacia.
Tienen normas que prohíben la publicidad de servicios legales, para
asegurar que los consumidores queden sumidos en la ignorancia sobre
cuáles son sus opciones. Pocas actividades son tan representativas del
mercantilismo, esa visión de valerse de la ley para parcelar el mercado
en contra de los consumidores”.
En el 2006, una encuesta de Apoyo Opinión yMercado2 señaló que
solo 26 por ciento de los ciudadanos creía en la palabra de un abogado,
frente a 93 por ciento en el caso de los bomberos, 81 por ciento en el de
los médicos, 75 por ciento en el de los ingenieros y profesores, 43 por
ciento en el de los empresarios y periodistas, etcétera. No estamos, por
así decirlo, en nuestro mejor momento los profesionales del derecho.
Fuera deeufemismos, la nuestra es una profesión golpeada dentro de
un sistema enfermo.
El presente trabajo abarca distintos temas que involucran la práctica profesional del abogado hoy. Dichos temas evolucionan de manera
constante, obligando al profesional a maximizar sus conocimientos
jurídicos, junto con sus habilidades prácticas. Es decir, a desarrollar sus
destrezas profesionales. Como se sabe, los...