Verdades Que Matan
Inseguridad, temor, intriga, desesperanza; son algunos de los sentimientos que tenían cientos de mujeres que habitaban en Juárez y sin lugar a duda son explicables por ellugar en el que vivían y los asesinatos consecuentes que se cometían sin castigo alguno. Las creencias que debilitaban la problemática porque era gente indígena con estereotipos culturales bastantediferentes; y los que querían hablar de los sucesos y eran callados por la clase social alta que resolvía todo con dinero.
Esta es parte de la problemática que era muy difícil de resolver por la faltade investigación y cuidados de las personas que tenían a cargo salvaguardar a los habitantes y sobre todo a las mujeres. Miles de interrogantes jamás contestadas porque el silencio cesaba ante talsituación sin que nadie pudiera hacer mayor cosa por el temor de que le pasara lo mismo.
Y que beneficioso que las personas pensaran que era el diablo quien les hacía daño para que los demás no tenganbuscar tantas explicaciones a lo que pasaba. Y esto es generalmente lo que en la sociedad ocurre, los que poseen pocos recursos económicos tienen derecho a hacer silencio.
Una parte importante es laterrible ironía involuntaria, que refleja la torpeza de los procesos judiciales que la policía mexicana ha efectuados sobre los mismos casos. Claro que a la ineptitud de las autoridades hay que sumarcomplicidades y encubrimientos. En Mentiras que Matan, Jennifer López interpreta una reportera norteamericana que investiga los feminicidios en Juárez y en cuestión de días vive la experienciajuarense completa y conoce a todos los actores involucrados (a algunos íntimamente) En Juárez se da la tormenta perfecta de migración, anonimato, corrupción e impunidad, que en el océano de inequidadeconómica y de género, devora a miserables mujeres y niñas de catorce años y menos.
Víctimas, madres indígenas desesperadas, periodistas heroicos, activistas ricachonas, camioneros y aristócratas...
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