victimologia

Reflexión personal sobre las razones que expliquen por qué los que tienen más miedo al delito tienen pocas probabilidades de padecerlo y los que tienen menos miedo al delito son los que tienen másprobabilidades de sufrirlo.



Podríamos decir que vivimos en una sociedad muy fragmentada, muy dinámica y muy cambiante y la gente lo que pide es seguridad, una demanda supersticiosa de seguridad.La gente lo que quiere es una seguridad genérica y absoluta en el empleo, en la higiene y seguridad en el trabajo, las pensiones, la seguridad financiera, alimentaria, los medicamentos, seguridadmedioambiental, construcción, comunicaciones, etc., y todo esto se vuelve a sintetizar en una demanda genérica de seguridad. Por eso prospera tanto, los despliegues policiales que producen como un efectoansiolítico en una población a la que no le pasa nada y que tampoco le va a pasar, porque el problema es la presencia, que satisface una demanda supersticiosa de seguridad en toda la ciudad. Por esocuando aumenta el riesgo, cuando aumenta el miedo, la gente lo que quiere es que no pase nada y evidentemente tampoco le va a pasar nada.
Tenemos una tasa de delincuencia muy baja y una tasa deencarcelamiento muy alta y sin embargo tenemos mucho miedo. Lo que difunden los medios de comunicación y la realidad no se parece en nada.
Vivimos en una sociedad especialmente segura, salvo en algunaszonas, en determinados grupos, es decir, que no le puede ocurrir a cualquiera cualquier cosa, sino que eso tiene un perfil de vulnerabilidad muy importante.
Los que no tienen miedo al delito son losque más probabilidades de padecerlo tienen y ahí tenemos a los jóvenes varones urbanos, que no tienen ningún miedo a padecer el delito y son los que más lo padecen. Digamos que las mujeres mayores dezonas urbanas, sienten un miedo enorme y sin embargo tienen unas probabilidades muy bajas de sufrir ningún delito y que son síntoma de otros miedos como que no duermen, les duelen los huesos, el hijo...