victor bravo

Nota Preliminar

La narrativa fantástica es extensa y variada. De Jean Paul a Jorge Luis Borges, de E. T. Hoffmann a Felisberto Hernández, esta narrativa ha expuesto sus variaciones y la razón que la constituye: la puesta en escena de la naturaleza misma de la ficción.
Nuestro trabajo intenta dar cuenta de esa razón y esas variaciones a través, primero, de una descripción de lo fantásticocomo una de las formas de la alteridad que se encuentra en la génesis de todo acontecimiento narrativo, y, segundo, haciendo referencia a un corpus relativamente amplio que ilustre, en cada caso, el fenómeno de lo fantástico.
Es necesario hacer algunas observaciones respecto al corpus utilizado. Su función de ejemplificación de las diversas manifestaciones de lo fantástico, de sus derivaciones yexpresiones colindantes, exigió un grado de amplitud y criterio de selección regido, primero, por el gusto y, segundo, por las limitaciones de información. Sin duda, toda antología se rige, en mayor o menor grado, por estos dos criterios y nuestra referencia a la producción fantástica europea y americana es nuestra «antología» de esta forma de la ficción.
El tratamiento de cada texto es variado yresponde a la necesidad de ilustrar con más o menos detenimiento cada momento particular. La reflexión parte, en todos los casos, de referencias a la narrativa fantástica europea y/o norteamericana, para concluir con una reflexión más detenida sobre la producción latinoamericana, Así en el amplio marco de la narrativa occidental, se intenta poner de relieve la importante producción fantástica denuestro continente.
Autores hay en nuestro continente cuya vasta producción fantástica se constituye en una propuesta estética coherente, Felisberto Hernández, Jorge Luis Borges y Julio Cortázar son tres claros ejemplos de este hecho. Nuestro trabajo, no obstante, siguiendo el criterio de selección establecido, se ha referido sólo a los textos más representativos de estos autores (y no a latotalidad de su obra), pensando que el planteamiento general de nuestra reflexión puede servir de punto de partida para abarcar la totalidad de la producción de un autor y destacar su unidad y coherencia.
PRÓLOGO A LA SEGUNDA EDICIÓN

La expresión de lo fantástico nos introduce en el ámbito de los estremecimientos donde la alteridad irrumpe, con sus imprevisibles formas, para señalar el lugar donde loreal muestra sus resquebrajaduras.
El sentimiento de lo fantástico es una de las más claras experiencias de la alteridad: en el horizonte de las homogeneidades, de las presuposiciones, de los reconocimientos, de las continuidades, de pronto irrumpe lo insólito, lo que escapa a la tranquilidad del sentido, lo que imanta hacia el vértigo y la negación, lo que nos hunde en el abismo de lasdiscontinuidades. Lo fantástico parece inscribirse en el horizonte más amplio de la modernidad, turbión de diferencias y negatividades donde todas las certezas sobre el ser y el mundo son puestas en duda, son interrogadas por la fuerza devastadora de la reflexividad. «La modernidad —señala Habermas (1980)— vive de la experiencia de rebelarse contra todo lo que es normativo».
El primer cuestionamiento essobre lo real, ese conjunto de certezas y presuposiciones sobre tiempo y espacio, número y causalidad, que integra, de manera no problemática, ser y mundo, y que excluye todo aquello que pueda anularlo, negarlo, ponerlo en peligro. Cuando las certezas de lo real se resquebrajan y abren la posibilidad de otros mundos, a veces ocultos en los mismos pliegues de lo real el ser vive la estremecedoraexperiencia de la alterídad. El pensamiento reflexivo de la modernidad, de Schopenhauer a Nietzsche, de Freud a Lacan, de Foucault a Deleuze y Lyotard, nos enseña que lo real no está dado sino que es una construcción, una representación, que se funda en el reconocimiento de sus interdicciones y jerarquías, que va de la verificación física a la sanción ética, y que excluye hacia un ámbito de...