Vida apostol pablo

El Año de San Pablo
Benedicto XVI

1) PERFIL DEL HOMBRE Y DEL APÓSTOL

Entramos en la vida de un hombre, que como dice San Lucas, al igual que otros “consagró su vida” al servicio del Señor (cfr. Hch 15, 26); llamado por el mismo Señor resucitado, a ser un Apóstol. “Él brilla, dice el santo Padre, como estrella de primera magnitud en la historia de la Iglesia, y no sólo de la Iglesiade los orígenes."

Para conocer a San pablo, no sólo tenemos el Libro de las Actas de los Apóstoles, sino también un sinnúmero de cartas escritas por él y que nos revelan su personalidad y su pensamiento. Lucas nos informa que su nombre original era Saulo (cfr Hch 7, 58; 8, 1); que era un judío proveniente de la diáspora; de la ciudad de Tarso. Llega a Jerusalén para estudiar la ley enla escuela del gran rabí Gamaliel (cfr. Hch 22, 3). Había aprendido un oficio manual y tosco, la fabricación de tiendas (cfr. Hch 18, 3), que le habría permitido mantenerse sin ser gravoso para la Iglesia (cfr. Hch 20, 34; 1Cor 4, 12; 2Cor 12, 13.14).

Fue decisivo para él conocer la comunidad de los que profesaban ser discípulos de Jesús. De ellos llegó a saber sobre la existencia de unanueva fe, -un nuevo “camino”, como se decía- que se centraba no tanto en la Ley de Dios, sino más en la persona de Jesús, crucificado y resucitado, a quien se unía el perdón de los pecados. Como judío lleno de celo, consideraba inaceptable este mensaje, más aún, lo veía como algo escandaloso, y por eso sintió como un deber perseguir a los seguidores de Cristo, incluso fuera de Jerusalén. Fuejustamente en el camino a Damasco, en los comienzos de los años 30, que Pablo, según sus palabras, fue “alcanzado por Cristo” (Flp 3, 12). Mientras Lucas relata el hecho con abundancia de detalles, él en sus cartas va directamente a lo esencial, y habla no solo de visión (cfr. 1Cor 9, 1), sino de iluminación (cfr. 2Cor 4, 6) y sobre todo de revelación y vocación en el encuentro con el Resucitado(cfr. Gál 1, 15.16). De hecho se definirá explícitamente “Apóstol por vocación” (cfr. Rm 1, 1; 1Cor 1, 1), para subrayar que su conversión era, no el resultado de un desarrollo de pensamientos, de reflexiones, sino el fruto de una intervención divina, de una imprevisible gracia divina. Desde entonces, todo lo que antes constituía para él valor, llegó a ser paradójicamente, según sus palabras,pérdida y basura (cfr. Flp 3, 7-10). Y desde ese momento, todas sus energías fueron puestas al servicio exclusivo de Cristo y su Evangelio. Entonces su existencia será la de un apóstol deseoso de “hacerse todo para todos” (1Cor 9, 22) sin reservas.

De aquí deriva para nosotros un lección muy importante: lo que vale es poner en el centro de la propia vida a Jesucristo, de manera que nuestraidentidad sea marcada esencialmente por el encuentro, por la comunión con Cristo y con su Palabra. Otra lección fundamental que nos ofrece, el Apóstol, es el aliento universal que caracteriza su apostolado.

2) LA CENTRALIDAD DE JESUCRISTO

Como ya hemos visto, es el encuentro con Cristo resucitado en el camino a Damasco que revoluciona totalmente su vida. Cristo llegó a ser para él razónsu razón de ser, y el motivo profundo de todo su trabajo apostólico. En sus cartas, después del Nombre de Dios, que aparece más de quinientas veces, el nombre que más menciona es el de Cristo (trescientas ochenta veces). Es entonces importante que nos demos cuenta de cuánto puede incidir Jesucristo en la vida de un hombre, y así también en nuestra misma vida. En realidad, Cristo Jesús es elápice de la historia de la salvación y por lo tanto, el verdadero punto de diferenciación, incluso en el diálogo con las otras religiones.

Mirando a Pablo, podremos formular así la interrogante de fondo: ¿cómo sucede el encuentro de un ser humano con Cristo? ¿y en qué consiste la relación que de ello se deriva? La respuesta dada por él mismo, puede ser comprendida en dos momentos....