Vigilia del almirante
Bastos, después de Hijo de hombre (1960) y Yo el Supremo (1974). En esta novela la historia(En contraposición a hechos meramente ficticios) sigue produciendo el material básico de su
producción literaria, pero en lugar de la historia de su país – la Guerra del Chaco, elpresidente Francia, etc. – este libro se desarrolla a partir del personaje histórico Cristóbal
Colón y el viaje al continente americano que éste emprendió hace más de cinco siglos. Fuepublicada, oportunamente, en 1992, en el quinto centenario del llamado ’Descubrimiento de
América’.
El proyecto narrativo de Roa Bastos es demasiado complejo como para permitir unresumen en pocas líneas, pero se puede argüir que una de sus mayores preocupaciones es
investigar sobre la producción de la palabra escrita, y, consecuentemente, sobre la producción
delrelato histórico. ¿Se puede confiar en la palabra escrita? ¿Es posible producir un texto que
refleje completamente un hecho original? He aquí algunas de las típicas preguntas que seencuentran presentes en los textos de Roa Bastos, no sólo en sus dos primeras novelas o en
sus mucho cuentos, sino también, como veremos aquí, en su tercera novela.
Más que sobre lahistoria, en la obra de Roa Bastos se problematiza sobre la presentación
de la historia. Esta problematización lleva implícita una postura de desconfianza hacia la
biografía históricaen general, hacia la supuesta objetividad de los textos historiográficos. En
el fondo hay una afirmación sobre la difícil relación entre la escritura y la historia: le escritura
nuncapuede ser una buena herramienta para describir fielmente la historia, porque una vez
ocurrido un hecho no hay forma de reproducirlo tal cual como fue, y menos a través de la
escritura.
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