Vinculo al fundador

Una pregunta de Paula – Una respuesta para todas


Queridas chicas:
Paula me escribió en estos días preguntándome si no quería compartir con ustedes alguna reflexión sobre nuestra vinculación al Padre y Fundador. La idea me gustó mucho. Me alegra que podamos intercambiar algunos pensamientos en este sentido: aquí van los míos y ojalá lleguen ecos a la revista de cómo ven ustedes este tema.Sus reflexiones, complementos o críticas seguramente serán muy valiosos para todas...

Vínculos – ¿un tema antropológico o teológico?
Lo primero que me llamó la atención en el pedido de Paula es que me sugiriera una reflexión sobre la dimensión "teológica" de la vinculación a nuestro Fundador. Suena como raro, pues por lo general la primera asociación que se suele hacer al concepto de vínculos esde carácter antropológico: Relacionarse, estar orientado a un tú para llegar al yo verdadero es parte de la naturaleza misma del ser humano.
Pero Paula tiene razón. Pues la naturaleza humana –precisamente su dimensión vinculativa– muestra de manera ejemplar su semejanza con el Dios Trino (cfr. Gén. 1,26). Dios es Amor y por eso está en relación de entrega y amor consigo mismo en el seno de laTrinidad y en (voluntad de) relación permanente con cada uno de nosotros. Cristo es la expresión encarnada de sus anhelos de relación, de vínculo con nosotros.
Desde esta realidad se comprende que todo vínculo humano verdadero tenga que ver con Dios, beba de allí como de su fuente y, en lo mas profundo, remita siempre a Dios. (A propósito, éste es el tema de la Encíclica "Deus caritas est" denuestro Papa Benedicto XVI).

Seguramente ya habrán percibido que la expresión vínculo tiene un papel relevante en Schoenstatt. Se habla del "organismo de vinculaciones", de la alianza de amor como un vínculo conducente y profundo con María, de la vinculación al santuario, del ser familia, etc.
No es para asombrarse. El carisma de Schoenstatt y las gracias del santuario quieren ser un caminopedagógico a la vez que un apoyo sobrenatural en nuestro esfuerzo por llegar a ser personas plenas en nuestra humanidad, mujeres que irradian en su ser el proyecto según el cual Dios pensó al ser humano. De allí que el tema vínculos sea esencial a nuestro carisma.


El jardín – Símbolo de una red de vínculos

En la historia de Schoenstatt se fue haciendo cada vez más propia una metáfora para expresaresta realidad. Se suele hablar de un jardín. Más precisamente de un Jardín de María. Tan rico es el simbolismo del jardín que el mismo fundador, el P. Kentenich, lo utiliza para definir "el rostro interno" de la Obra de Schoenstatt, digamos su perfil más propio. No voy a referirme a todo ese simbolismo, ni al contexto general en el que se enmarca, pero me gustaría ubicar aquí la pregunta dePaula: por qué nos vinculamos al Padre Kentenich.

Toda familia espiritual es como un jardín que manifiesta la unidad en la diversidad: El jardín es un todo, pero cada parte, cada flor, cada árbol aporta lo suyo, su identidad para la riqueza común. Por esa honda comunión en bien del todo es que la imagen del jardín es apropiada para expresar identidad y comunidad, entrega y reciprocidad mutuas a lavez que voluntad de constituir un todo en bien de la humanidad, para que otros se beneficien con esa riqueza.


Carisma – El misterio del suelo nutricio

Lo que regala identidad común al jardín en medio de la pluralidad es su perímetro, el suelo que lo une, la inserción de todas las raíces en una tierra común en la cual cada individualidad crece y desde la cual se alimenta.
En el marco de unafamilia espiritual ese suelo nutricio es su carisma, el don de Dios que constituye su razón de ser más profunda y su misión para la iglesia y la familia humana. (En la teología cristiana se llama "carisma" de una comunidad al don de Dios por el cual y para el cual ella es llamada a la vida. O sea, el carisma de un movimiento no es algo que la comunidad "inventa", sino que descubre y que es un...