Virgen de la Luz
¿Para quién se hicieron los favores? ¿No fueron para el infeliz? Sí, Señora es honor vuestro amparar a un desvalido; muévate a piedad laoscuridad en que me hallo; alúmbrame, Señora, y seré salvo, extiende tu mano protectora y respirara un cautivo del pecado, todo cuanto miro en ti me alienta y me conforta, la dulzura de tu nombre; esesemblante agradable y risueño todo me hace esperar mi felicidad: Permite, Señora, que un desdichado de te llame Madre, sí, Madre Santísima de la Luz, Madre mía, piedad, misericordia, acepta por lo tantolas alabanzas que mis labios te dan y usa conmigo de tus antiguas gracias.
(En seguida se le rezará la oración siguiente, en la cual pedirá cada uno el remedio de sus necesidades mas urgentes a laSantísima Señora.)
ORACIÓN
Amantísima y Piadosísima Madre de la Luz, quien no conozca tus bondades, quien no sepa lo mucho que amas a los pecadores y el placer que ellos te causan cuando susaflicciones y necesidades acuden a la fuente riquísima e inagotable de bienes que emanan de tu corazón; ése, pues, soberana Reina, no se acogerá a ti que eres la dispensadora de los bienes celestiales y elúnico amparo de los que gimen en este mundo de miserias y tropiezos.
Mas yo, Reina mía, consuelo mío, tesoro mío, única esperanza y refugio de mi atribulado corazón: Yo celestial Reina,......
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