Virtud 100

En el momento mismo de nuestro nacimiento, las conexiones neuronales que operan
nuestro cuerpo dirigen los procesos de sensación y percepción, advirtiendo que el proceso
de sensación reúne loselementos físicos corporales para recoger la información del medio
ambiente y que se detallan al analizar las fuentes receptoras corporales de la visión, el tacto,
el gusto, el oído y el olfato; y queel proceso de percepción es la interpretación subjetiva de
las sensaciones. Con estos dos procesos iniciamos el contacto con nuestro medio ambiente y
posteriormente tomamos las decisiones cuandoestamos inmersos en él.
A medida que vamos creciendo en este planeta, hallamos diferentes formas de utilizar los
sentidos para así desenvolvernos en nuestro hábitat y poder explorarlo de la manera en laque nosotros identifiquemos la más segura y la más agradable, para luego ocupar un lugar en
el micro - medio seleccionado con total confianza. Nos damos cuenta que existimos dentro
de una sociedadconformada por un sinnúmero de elementos que permiten que convivamos
en unidades distintas de individuos con el fin de cumplir, mediante una mutua cooperación,
todos o algunos de los fines de lavida que nosotros mismos logremos definir1. De esta
manera, nosotros como seres humanos logramos identificar, que según la información del
medio ambiente y las decisiones que tomemos parainvolucrarnos con él, concretan nuestro
marco de bienestar. Y aún más, vislumbramos como seres racionales que somos, que ciertos
hábitos de vida permiten que cada vez las decisiones sean más correctas y nosacerquen más
rápido hacia nuestros objetivos de vida.
Por naturaleza, todas las cosas recobran su poder de concentración para recogerse en sí
mismos, desde la vida en una célula germinal hasta unagalaxia entera. Todo retorna a la
posibilidad de existir en sí mismo, así como el hombre regresa indudablemente a la virtud de
su humanidad, comprendiendo la virtud como la capacidad individual que...