Viva Cristo Rey

¿Viva Cristo Rey?
¡Que viva mi Cristo, que viva mi Rey!
¡Que impere doquiera triunfante su ley!
¡Que impere doquiera triunfante su ley!
¡Viva Cristo Rey, viva Cristo Rey!

Estas son las palabras con las que el corazón del cristiano canta lleno de alegría al festejar a su Rey. Año tras año la Iglesia al terminar el ciclo litúrgico da un lugar especial a nuestro Redentor y nos invita acelebrarlo como Rey. Esta fiesta coincide con el último domingo del Año Litúrgico. Fue instaurada por Pio XI el 11 de marzo de 1925. Apareció en el contexto histórico y social de una Iglesia sola y vulnerable frente al despertar republicano de las naciones en contra de las monarquías, que tradicionalmente eran cristianas. Con esta fiesta el Papa quiso motivar a los católicos a reconocer públicamente,mediante un acto consagratorio de la nación, a Cristo Rey.

La reforma litúrgica post-conciliar movió la fecha de la celebración, dándole un nuevo sentido. Al cerrar el año con esta fiesta, se quiso subrayar la dimensión escatológica del Reino de Dios. Cristo aparece como el centro de toda la historia universal, “el Alfa y la Omega, el Primero y el Último, el Principio y el Fin” (Ap 22, 12-13). Supoder no se identifica con el poder político, sino que rebasa todo elemento circunstancial, para centrarse en lo íntimo del hombre, en su concepción de la vida: Cristo reina en la sociedad, no a través de los poderes gubernamentales, sino impregnando la mentalidad del hombre de su mensaje de amor, justicia y servicio1.

La intención que tuvo el Papa Pio XI en aquella ocasión fue precisamenteinvitar a los católicos a dar testimonio de su fe en Cristo Rey de universo, a ejemplo de todos aquellos que por el nombre de Cristo murieron mártires exclamando ¡Viva Cristo Rey! Echemos una mirada a la historia de nuestra propia Patria.

El año de 1926 era difícil para la nación mexicana, pues por orden de Plutarco Elías Calles, presidente de México, las acciones de culto dentro de la Iglesia Católicahabían sido restringidas así como las acciones educativas por parte de la misma. Esto propició que en algunos estados de la nación, se levantara en armas un movimiento, que se conoció como “movimiento cristero”, compuesto por peones, campesinos y trabajadores de granjas en respuesta a las normas adoptadas por el Gobierno mexicano. Este levantamiento tuvo especial auge en los estados de Jalisco,Nayarit, Guanajuato, Zacatecas y Michoacán.

Todo parecía normal en el poblado de Los Reyes, en Michoacán. Los días transcurrían de modo cotidiano y nadie podía pensar que en este lugar sucedería lo que en comunidades vecinas estaba pasando. Muchos católicos por defender sus creencias estaban siendo asesinados, algunos martirizados, solamente porque no querían renegar de su fe y someterse a lasdisposiciones del gobierno. Los Reyes no sería la excepción, el gobierno no descansaría hasta que lograra su cometido, hacer cesar de algún modo la acción de la Iglesia en los ámbitos sociales de todas las clases económicas de la nación.

Una mañana mientras el padre Rutilo se disponía a celebrar la Eucaristía, llego un muchacho un tanto asustado por lo que había visto y oído:
-¡Padrecito,Padrecito!, ¡pronto! ¡Tiene que salir de aquí!-
¿Qué pasa Joaquín, por que tanto escándalo?- pregunto el padre
- Apresúrese viene por usted el ejército, corra padre y salve su vida,
Pero ¿Qué estás diciendo? ¿A qué te refieres?- Insistió el padre Rutilo
- Esta mañana muy de madrugada, mientras llevaba a mis vacas al lugar donde acostumbran a pastar, a las faldas del cerro, escuche unos balazos, tuvemucho miedo, pero la curiosidad pudo más que lo que yo sentía. Me acerque con mucha cautela y sin decir palabra alguna mire a lo lejos como los soldados maltrataban a la familia de José López, pues este no quería acceder a la petición de aquel que lo maltrataba pues le pedía que renegara de su fe.
Atónito por lo que veía no sabía que hacer, quedé paralizado pues los soldados decían, tú servirás...