VIVA VÍCTOR JARA POR SIEMPR1

Páginas: 9 (2233 palabras) Publicado: 7 de octubre de 2015
¡VIVA VÍCTOR JARA POR SIEMPRE!

 
No sé si fue estupor, dolor, furia, impotencia o todo ellos junto lo que sentí cuando me enteré del asesinato de Víctor Jara. Una de las ignominias más afrentosas, entre todas las cometidas por el brutal régimen de Augusto Pinochet en Chile en la década de los 70.¿
Anque muy doloroso, reproducimos este reportaje porque también nos presenta un marco historico enel que sucedieron estos criminales acontecimientos. ¡Viva Víctor Jara, por siempre!
«¡ay,  que ser más infeliz el que mandó disparar sabiendo cómo evitar una matanza tan vil!» (Víctor Jara, “Preguntas por Puerto Montt”)
’La muerte lenta de Víctor Jara’ es un reportaje del suplemento ’Domingo’ del 6 de diciembre de 2009.
«Cansados y con sus manos entrelazadas en la nuca, los 600 académicos,estudiantes y funcionarios de la Universidad Técnica del Estado (UTE) tomados prisioneros por los militares golpistas iban entrando al Estadio Chile, un pequeño recinto deportivo techado cercano al palacio de La Moneda. Un oficial con lentes oscuras, rostro pintado, metralleta terciada, granadas colgando en su pecho, pistola y cuchillo corvo en el cinturón, observaba desde arriba de un cajón a losprisioneros, que habían permanecido en la universidad para defender el Gobierno del presidente socialista Salvador Allende. Era el 12 de septiembre de 1973, día siguiente del golpe militar, en el alba de la dictadura de 17 años encabezada por el general Augusto Pinochet.
Con voz estentórea, el oficial repentinamente gritó al ver a un prisionero de pelo ensortijado:
-¡A ese hijo de puta me lo traen paraacá! -gritó a un conscripto, recuerda el abogado Boris Navia, uno de los que caminaba en la fila de prisioneros.
"¡A ese huevón!, ¡a ése!", le gritó al soldado, que empujó con violencia al prisionero. "¡No me lo traten como señorita, carajo!", espetó insatisfecho el oficial. Al oír la orden, el conscripto dio un culatazo al prisionero, que cayó a los pies del oficial.
-¡Así que vos sos VíctorJara, el cantante marxista, comunista concha de tu madre, cantor de pura mierda! -gritó el oficial. Navia rememora. Es uno de los testigos del juez Juan Fuentes, que investiga el asesinato del cantautor, uno de los crímenes emblemáticos de la dictadura, porque Jara fue con su guitarra y con sus versos el trovador de la revolución socialista del Gobierno de Allende en Chile. Por su impacto y laimpunidad en que están los culpables, el crimen de Jara es en Chile el equivalente al asesinato de Federico García Lorca en España.
"Lo golpeaba, lo golpeaba. Una y otra vez. En el cuerpo, en la cabeza, descargando con furia las patadas. Casi le estalla un ojo. Nunca olvidaré el ruido de esa bota en las costillas. Víctor sonreía. Él siempre sonreía, tenía un rostro sonriente, y eso descomponía más alfacho. De repente, el oficial desenfundó la pistola. Pensé que lo iba a matar. Siguió golpeándolo con el cañón del arma. Le rompió la cabeza y el rostro de Víctor quedó cubierto por la sangre que bajaba desde su frente", cuenta a este periódico el abogado Navia.
Los prisioneros se habían quedado pasmados mirando la escena. Cuando el oficial, conocido como El Príncipe y hasta hoy no identificado conplena certeza, se cansó de golpear, ordenó a los soldados que pusieran a Jara en un pasillo y que lo mataran si se movía. El autor de canciones como El cigarrito y Te recuerdo Amanda, que Serrat, Sabina, Silvio Rodríguez y Víctor Manuel han incorporado en sus repertorios, entró así al campo de prisioneros improvisado por los militares donde vivió sus últimas horas.
Muchos recordaron a Jara conemoción esta semana, cuando su viuda e hijas y la fundación que lleva su nombre organizaron el funeral que no pudo tener en 1973, la despedida popular que merecía, para sepultar los restos del cantautor, exhumados en junio por orden del juez y devueltos a la familia después de una nueva autopsia, que confirmó las huellas de bala y torturas.
El ensañamiento con Jara fue uno de los signos de la...
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