vivienda

VIVIENDA: Derecho o Mercancía? Proceso o producto?
Alejandro Florian Borbón
FEDEVIVIENDA
COLOMBIA
aflorian@fedevivienda.org.co
Presentado por Alejandro Florian en la Universidad Nacional de Tucumán
(Argentina) en Noviembre de 2003.
Agradecimientos al Arquitecto Enrique Ortiz quien me facilito las notas que
tenía preparadas para este evento al que desafortunadamente no pudo asistir
pormotivos ajenos a sus voluntad.
INTRODUCCIÓN
Han pasado ya varias décadas desde que se comenzó a disfrutar de la
posibilidad del intercambio regional de diagnósticos, conceptos, experiencias,
métodos e instrumentos en torno al problema de la vivienda. Sin embargo
una especie de inercia de las que habita en nuestro realismo mágico regional,
continua manteniéndonos pasmados ante la evidencia deun conjunto
creciente de señales e indicadores que indican el fracaso de las políticas
“oficiales” de vivienda. Con excepción de Chile y solo hablando de “éxito” en
términos cuantitativos, por cuanto sus realizaciones no están exentas de
severos cuestionamientos a la hora de ser leídos los resultados con
parámetros como la calidad, y habitabilidad entre otros.
Quizá hemos pasado años tanconcentrados mirando los árboles que hemos
relegado a un segundo plano intrascendente, el bosque en el que habitan,
sus relaciones, interfases e interdependencias tanto simbióticas como
sistémicas.
De hecho la búsqueda “oficial” de alternativas para solucionar el “problema
de la vivienda” ha hecho girar las acciones, los recursos, la energía y la
imaginación de nuestros estados precarios, entorno al producto concebido
real y simbólicamente como una mercancía y en tal calidad se continua
insistiendo tercamente en desarrollar políticas orientadas a la ilusión de la
acción “inteligente” de los mercados que generarán la oferta adecuada,
suficiente y asequible de la “mercancía vivienda” para que ésta sea
adquirida por la demanda. Así que, en tanto la vivienda es considerada una
simplemercancía, el mercado la proveerá y le asignará el precio y si la
demanda no es “efectiva”, pues fácil, la habilitamos con un subsidio para que
el “mercado” no se frene ni se distorsione y continúe brindándonos viviendas
a granel, felicidad para los “demandantes” y sobre todo prosperidad, empleo
y riqueza a través de la industria de la construcción.
Sin embargo la realidad de un continenteempobrecido y en crisis social nos
demuestra que esta receta-cuento-embeleco que ha sido aplicada no lo solo
al tema de la vivienda, no solamente no ha disminuido el problema, sino que
por el contrario lo ha agravado y extendido.

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Por supuesto que no pretendo plantear una receta ni un cuento mejor, solo
quisiera colocar sobre la mesa algunas reflexiones y preguntas que han ido
surgiendoproducto del trabajo y la búsqueda de alternativas habitacionales
de cientos de organizaciones sociales, las ONG, académicos miembros de la
Coalición Internacional Hábitat de América Latina y el Caribe y algunos
dirigentes políticos e incluso funcionarios de gobiernos locales progresistas
de la región. Con algunas de estas preguntas trabajamos para que entre
todos miremos y afinemos lasensibilidad y la percepción del significado del
bosque y no solo de los árboles.
Por este camino, el diálogo y la construcción colectiva del sentido y el
significado del concepto hábitat nos puede ayudar a reconocer y configurar
una plataforma de elementos estructurales y dinámicos para construir
políticas habitacionales alternativas, desde una perspectiva menos pobre y
limitada que la“vivienda-mercancía”. Hablar de hábitat y políticas
habitacionales nos permite volver a darle visibilidad y relevancia a los sujetos
colectivos que lo habitamos y hacemos parte de él, nos conduce a renovar el
sentido político de la ciudadanía. El concepto hábitat nos abre los ojos frente
a las relaciones y los procesos productivos que lo alteran o modifican, nos
obliga al debate sobre principios y...