Voluntad
Ahora la ciudad lucía tranquila, la paz había regresado a las calles del distrito Este de Azalania; los soldados de la guardia pública se ocupaban en dispersar a aquellos curiosos atraídos por los rumores sobre un singular grupo de aventureros que acababa de salvarlos de un ataque enemigo; lo cual significaba una nueva experiencia para los jóvenes y una alegría para los mayores,quienes recordaban a sus héroes que ahora habían regresado a casa.
Solo quedaban unas pocas huellas que indicaban la batalla que había tenido lugar hace apenas unos escasos minutos en la plaza pública justo entre el mercado y el palacete del gobernador distrital.
Los pobladores que no habían podido resguardarse y habían sido testigos del encuentro seguían atónitos, pues de no haber estado ahí leshubiera sido imposible creer que bastaron seis héroes para derrotar a más de dos docenas de atacantes. Y eran en efecto aquellos pobladores que estuvieron presentes en la batalla los encargados de esparcir de viva voz, y con ciertos arreglos fantásticos, los hechos que habían transcurrido esa tarde.
El enemigo derrotado fue un grupo de escurridizos mésmeres, una raza de seres de piel escamosa yojos de pupilas oblicuas, lengua bifurcada y corazones tan ponzoñosos como su misma saliva. Estos detestables intrusos habían pasado desapercibidos gracias a su innata habilidad para crear ilusiones y plantar sugestiones en las mentes ajenas. Su presencia en la ciudad ya se remontaba a algunos meses; cada cierto tiempo un nuevo mesmer se infiltraba en Azalania y usurpaban la identidad de otropoblador. A eso se dedicaban sus predecesores camaradas: buscar potenciales víctimas que suplantar. Pretendían poco a poco ir apoderándose de la ciudad de Azalania, cuyo desarrollo cada vez iba en aumento pero que aun resultaba un blanco fácil para los osados seres malignos.
Los viperinos malandrines no contaban con la visita del grupo de héroes que regresaban a tierras aliadas a pasar unos días deasueto después de su última y más lejana aventura.
Habían viajado hasta las islas del este del gran mar Egorum. De aquellas apartadas tierras regresaron triunfantes al combatir a un temible tirano que pretendía apoderarse de Seiryu, el reino más vasto de aquella región. Además de la gloria regresaron con un nuevo aliado.
Mientras los guardias hacían su labor la campaña de héroes se reagrupaba yorganizaba y ayudaban a la gente del pueblo como mejor les parecía.
Siendo Azalania una ciudad habitada casi en su totalidad por zinus, los aventureros de otras razas causaban aun una mayor expectación. Por su parte Aura Glitteren-Draft y su primo Urien Draftspear, al ser originarios de la ciudad y ambos zinus, causaban expectación debido a su fama y a su noble ascendencia.
La carismática Aurano pasaba desapercibida por los varones tanto pobladores como de la milicia quienes no podían evitar voltear a ver al ver pasar una zinu tan hermosa. Su larga cabellera negra con brillos azulados contrastaban con su pelaje gris bajo. Enfundada en una lustrosa armadura plateada, ni el duro aspecto de guerrera opacaba su belleza natural y su atrayente personalidad. Con una melodiosa pero tenaz vozdaba instrucciones a algunos guardias del gobernador, algo que quizás chocaría en prepotencia si se tratase de cualquier aventurero quien solo se encuentre de paso, pero Aura Glitteren-Draft además de presencia contaba con la ventaja de ser natal de Azalania y después de todo ella sería la heredera del gobernador del Oeste.
Urien, el alto caballero hubiese tenido la misma atención por parte de lasdamas pero no había ninguna fémina en el sitio: todas las zinus del pueblo, o bien aterrorizadas o bien aconsejadas, se mantenían al resguardo desde que se dio la voz de alarma avisando sobre el ataque enemigo. Con su habilidad militar y su heroica presencia se hacia oír igualmente que Aura, lo cual no era de extrañar siendo ambos parientes. Cualquier poblador que lo conociera podía alardear de...
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