Vuelva Usted Mañana. Mariano José De Larra

Administraciones Públicas Españolas

Vuelva Usted Mañana
Mariano José de Larra

Mariano José de Larra fue un escritor, periodista y político español; uno de los más importantes exponentes del romanticismo español. Publicó, bajo diferentes pseudónimos, más doscientos artículos en sólo ocho años.
El artículo que nos ocupa en esta ocasión es Vuelva usted mañana, publicado en 1833 bajo elpseudónimo El pobrecito hablador.
Larra abre el artículo criticando de forma irónica la pereza. Para él, el mayor de los pecados y el que aqueja en mayor medida a la sociedad española de su tiempo.
Explica que, los extranjeros tienen una idea equivocada de España y, sobre todo, de los españoles. Considerándoles bien caballeros del siglo XVII o bien parte de tribus nómadas.
Critica, además, el orgullodel ser humano con las siguientes palabras: “Tal es el orgullo del hombre, que más quiere declarar en alta voz que las cosas son incomprensibles cuando no las comprende él, que confesar que el ignorarlas puede depender de su torpeza”.
Y después de esta breve introducción, comienza a relatar la historia. Monsieur Sans-dèlai (Sin demora) visita España, cartas de recomendación en mano, pararesolver ciertos asuntos de familia e invertir en diversos proyectos. Llega con una agenda cerrada, con la idea de marcharse al cabo de quince días.
Fígaro (pseudónimo de Larra), su anfitrión en España, intenta convencerle de que vuelva a su país porque aquí no conseguirá más que perder el tiempo. Le intenta hacer entender que España, a diferencia de Francia, no se caracteriza por ser un país activoy trabajar. Pero el francés no acepta el consejo y comienza sus diligencias.
En la primera jornada, salen a buscar un genealogista. Este les invita una y otra vez a volver mañana, hasta que finalmente concluye el trabajo tras quince días. Sólo con la primera tarea Sans-dèlei ya agota el tiempo que tenía previsto permanecer en nuestro país.
“Vuelva usted mañana”. Y la misma situación se repiteposteriormente con el traductor, el escribiente, el sastre, el zapatero, la planchadora, el sombrerero… Ante el asombro del francés, Fígaro le dirige estas palabras: “Pues así son todos. No comerán por no llevar la comida a la boca”.
Comienzan entonces el desventurado peregrinaje de Sans-dèlei por la Adminsitración Pública española. Un oficial de mesa que no trabaja y cuando no trabaja, no va atrabajar; un expediente que pasa a ser un informe del que nadie se ocupa; e interminables y farragosos procedimientos burocráticos, dificultan enormemente la resolución de sus asuntos.
Después de seis meses, el francés no ha conseguido otra cosa que escuchar: “Vuelva usted mañana”. Y se vuelve a ironizar sobre la pereza: “La pereza es la verdadera intriga… Es más fácil negar las cosas que enterarsede ellas”.
En una conversación con un compatriota, Fígaro critica la “manía diabólica” de continuar con lo establecido, aun sabiendo que no es lo mejor posible. “Poner obstáculos a todo lo bueno, y el que pueda que lo venza”. Defiende, además, a Sans-dèlei, por arriesgarse a cambiar su vida y a construirla en un país extranjero.
Se trasluce la idea de que los españoles tiran piedras contra supropio tejado, puesto que no facilitan los trámites burocráticos a un hombre que llega para invertir dinero y crear riqueza en España. “Ha dejado otro capital de talento, que vale por lo menos tanto como el del dinero; ha dado de comer a los pocos o muchos naturales de quien ha tenido necesariamente que valerse; ha hecho una mejora, y hasta ha contribuido al aumento de la población con su nuevafamilia”.
Todo le parecen ventajas a la llegada de extranjeros al país. Y recomienda a todos los Gobiernos, sabios y prudentes, que faciliten su establecimiento en la medida de lo posible y les reciban de forma hospitalaria.
Mientras tanto, Sans-dèlei, harto de España y los españoles, decide volver a Francia con sus asuntos sin concluir y sin nada bueno que decir de su experiencia aquí.
Fígaro...