wallon

PRÓLOGO:
Las manifestaciones de la vida psíquica tienen un material en común, del que proceden las diferentes realizaciones de la misma como, asimismo, las delimitaciones, es decir, las diferenciaciones más tempranas que originan.
Los tres estudios que realiza Wallon, constituyen un conjunto, se complementan mutuamente. Cada uno de ellos se refiere a uno de los tres grandes aspectos que tomanlas realizaciones psíquicas del niño durante sus primeros tres años de vida, además, señalan encadenamientos y concordancias entre ellos.
El autor, en esta obra, comprueba la tendencia que hay a no estudiar los hechos en serie cerrada, sino a enfocarlos en varios de los diferentes conjuntos en los que pueden participar.
Según Wallon, la recolección de hechos no puede ser puramente mecánica;tiene siempre una significación más o menos manifiesta. No hay hecho en sí; un hecho es siempre más o menos conformado por quien lo comprueba. Puede responder más a patrones, rutinas, que a una individualización aclaradora de rasgos provistos por la experiencia. De este modo, una colección indefinida de hechos pueden no valer lo que un hecho único, pero significativo. Un hecho sólo tiene interés en lamedida en que está determinado, y no puede estarlo sino por sus relaciones con algo que lo sobrepasa, es decir, con una totalidad a la cual pueda ser incorporado de alguna manera. Pero él mismo es una totalidad que tiene su fisonomía (expresión), su definición y se refiere, por los rasgos que lo componen, a otros conjuntos más elementales. De esto resulta que confrontar un hecho con todos lossistemas con los que puede estar relacionado es tratarlo no sólo según su naturaleza, sino que el mejor observador debe ser capaz de utilizar la mayor cantidad de sistemas, alternativamente, para individualizar y explicar el hecho.
La psicología es, por cierto, uno de los dominios en que la limitación excesiva de los hechos estudiados ocasiona mayores inconvenientes. En efecto, en la medida en quesu objeto se eleva por encima de las condiciones más elementales, las que son de orden material, para entrar en conjuntos de clasificación más particular, se presenta una gran ignorancia en cuanto al estudio de estos últimos, los priva de condiciones que son determinantes. Un claro ejemplo es el desconocimiento de la unidad indisoluble que forman el niño y el adulto, el hombre y la sociedad. Sinembargo, la especie sólo puede encontrar su razón de ser en el tipo adulto, y el niño tiende hacia él como el sistema hacia su equilibrio. Del mismo modo, escindir al hombre de la sociedad, es decir, oponer al individuo a la sociedad, como suele hacerse, es privarlo de la corteza cerebral. Pues, el desarrollo y la configuración de los hemisferios cerebrales, los que distinguen con mayor precisión ala especie humana de las especies vecinas, se deben a la aparición de campos corticales, como el del lenguaje, que implican a la sociedad. Para el hombre la sociedad es una necesidad, una realidad orgánica. No se trata de que esté organizada por completo en su organismo, en los centros de lenguaje (como no lo está), antes de su aprendizaje. La acción se realiza en un sentido inverso. El individuorecibe sus determinaciones de la sociedad, son un complemento necesario para él, tiende hacia la vida social como hacia su estado de equilibrio.
Muchas dificultades se deben a que no han sido tomados en consideración los conjuntos naturales donde se inscribe la vida psíquica. Allí está, sin duda, el origen de ciertas oposiciones. Hacer en el sistema un corte que lo separe de sus condiciones deequilibrio, es obligarse a suponer, en base a los fragmentos, un principio íntimo que los haga evolucionar desde el interior por una especie de autocreación.
Es cierto que en los hechos de desarrollo humano, como también en los fenómenos de la vida, interviene una dificultad que no les es exclusiva, pero sí manifiesta: se trata de la larga duración de las etapas que se encaminan hacia el estado...