Women Workers

Women workers in the maquiladoras and the debate on global labor standards - Edmé Domínguez, Rosalba Icaza, Cirila Quintero, Silvia López, and Asa Stenman

Síntesis
Desde principios de 1900 se han debatido las ventajas y desventajas, así como los riesgos y las estrategias de trabajo con respecto al tema de las mujeres trabajadoras. En este artículo se habla específicamente del caso de lasmujeres que trabajan dentro de las maquiladoras en México y Centroamérica, trabajos industriales para el bienestar de las mujeres, enfatizando los beneficios aparentes que estos trabajos tienen para las mujeres.
Linda Lim and Kabeer (autores de investigaciones de este tema) no sólo cuestionan las condiciones negativas de trabajo, sino también sostienen que esta es la única opción para que la mayoría delas mujeres pueda “trabajar con dignidad”. Para Lim este tipo de trabajo son una buena alternativa para que la mujer acceda al sector formal. Kabeer quiere que se reconozca que estas mujeres están mejorando su autoestima y alcanzan su independencia económica al pertenecer a este tipo de sectores laborales. El sector de la maquiladora en México se inició en la década de 1960, con industrias deexportación de sectores como: minería, hierro, acero, industria ligera y textil, etc. En el caso de Centroamérica, las maquiladoras comenzaron a desarrollarse hasta finales de 1980 y se han desarrollado principalmente en el sector textil y de confección industrias. Durante la década de 1970, varios estudios centrándose en las maquiladoras de la frontera México-Estados Unidos encontraron que lostrabajadores en las maquilas eran jóvenes, solteros, sin hijos, y mujeres migrantes relativamente más educadas. La fuerza de trabajo comenzó a cambiar a partir del 82, cuando el perfil general en su mayoría eran mujeres casadas, de mediana edad (al parecer tan dóciles como las mujeres jóvenes de antes), y los hombres. De ser el 80% de la mano de obra en las maquiladores en la década de los ochentas,actualmente las mujeres son el 58.8%, una notable reducción en la cantidad de las contrataciones. Las mujeres casadas se perciben cada vez como mejores trabajadoras pues son más maduras, confiables, y son menos propensas a cambiar contantemente de trabajo, a diferencia de las mujeres solteras. Los empleadores justifican su contratación práctica (mujeres casadas), al afirmar que están ayudando afortalecer a las familias mexicanas con mujeres que contribuyen a apoyar sus hogares. Los ingresos económicos en mujeres jóvenes que ingresan al mercado laboral, sin hogar propio ni responsabilidades familiares, pueden ser considerados como señal de mayor independencia. Por otro lado, las madres solteras o casadas no pueden presumir el mismo tipo de autonomía debido a que sus responsabilidadesfamiliares son mayormente prioritarias.
En el caso de Centroamérica, las industrias maquiladoras, se concentraron en el sector textil, empleando predominantemente mujeres; la mayoría mujeres jóvenes entre 16 y 30 años de edad. A mediados de la década de 1990, las mujeres representaban alrededor 78% de todos los trabajadores de la maquila, y para el 2008 el 80% de todas las mujeres en el sector laboral.Los bajos ingresos que ganan las mujeres trabajando en maquiladoras parece sólo un medio de supervivencia económica, que rara vez les permite mejorar o cuestionar las jerarquías culturales. Lim y Kabeer argumentan que los salarios y las condiciones de trabajo son mejores en la industria maquiladora, que con otras oportunidades de trabajo disponibles para mujeres. Algunas mujeres que trabajan enmaquilas clasifican sus trabajos como mejores económicamente hablando que otro más informales, como por ejemplo el de una empleada doméstica, en muchas de las ciudades fronterizas del norte de México, trabajos informales como este compiten con los trabajos de las maquiladoras en términos de salarios, pero también tienen experiencias negativas con las malas condiciones de trabajo y la pocas...