Yaaaaaaaaa
Comienza este relato conmovedor en un campamento de refugiados etíopes, en el momento que un comando israelí rescata a los judíos del grupo, que como todos, están en peligro demuerte por el hambre, la sed y los bandoleros que siempre se aprovechan de la pobreza y la fragilidad humana. En ese escenario dos madres se cruzan una profunda mirada de compasión, una es judía yacaba de perder su hijo por desnutrición y la otra cristiana y teme que su hijo tenga el mismo destino, si se queda. La madre judía está en la fila de los que van a ser rescatados con sus “manos vacías”de hijo y siente que la mano de un niño de 9 años se la toma, intuye de qué se trata y mira atrás y cruza su mirada con la otra madre suplicante y comprende. La cadena del amor no tiene fronteras nigenéticas, ni de raza, color o religión. Esta solidaridad por la vida que la función femenina cumple entre nosotros, es la muestra cabal del amor humano desprendido de todo intento de posesión yresentimiento.
No fue fácil desprenderse madre e hijo, el pequeño se resistía y la madre con el corazón desgarrado le dice: “vete, sé digno de ser” y agrega “no vuelvas hasta alcanzarlo”. No es tan fácilser digno de vivir la vida desde el ser que anhela ser más con los demás. Es decir llevar la vida autosuperándose con los demás, no a costa de los demás. Este es el camino que nuestro personaje,Schlomo, inicia cuando deja su madre por otra que lo ayuda a cruzar la frontera. Para ello tiene que presentarse como hijo de otra mujer y judío. Cambia su nombre y asume el desarraigo para sobrevivir.Cuando llega a Israel la madre “salvadora” muere y Schlomo es adoptado por una familia judía venida de Francia con ideas progresistas, defensores de la solidaridad y la paz. En medio de este mundo llenode divisiones, prejuicios, sectarismos y terrorismos de todo tipo, el film va tejiendo, a través de Schlomo, una red donde están vigentes las funciones (no los roles) que nos integran y ayudan a...
Regístrate para leer el documento completo.