Yo tambien estube aqui



















¡YO TAMBIÉN ESTUVE AQUÍ!
Muy distante de la ciudad, en “Vergelpampa”, un paraje de atracción turística, vivía Don JD y su amada esposa Nobita. Estaba por nacer el quinto y último hijo de la pareja. Razones laborales obligaron a JD ausentarse de casa.
-Mi esposa sola cuando más me necesita; en cualquier momento dará a luz – se lamentaba JD. La tardeparcialmente nublada se preparaba para recibir a la lluvia; los pocos rayos de sol se eclipsaron totalmente, luego truenos y relámpagos, presagiaron un atardecer tormentoso en pleno verano del 54.
- ¡Gina, Gina, creo que ya, ¡ ya llega! – Gritaba Nobita - ¿Quién llega? –¡Ay Dios mío! Que no salga todavía, va a caer un aguacero – Se confundía Gina.
A más de 15 kilómetros, al otro lado del río“Huaca”, atendía Doña Santos, renombrada matrona del lugar. Con método empírico, pero, con sus manos bendecidas por Dios, atendió el parto. El 24 de febrero, a las 8 de la noche, con lluvia torrencial, nació Antón. Después de tres días, los tres retornaron a su dulce hogar para seguir cultivando la tierra. Antón, era un niño extrovertido, locuaz y de gran imaginación; al cumplir 7 años, su amigoWill, pendenciero y convincente, le propuso escaparse de casa.
-¡Ccaroso, vamos a la “Cuchilla” a la cabaña secreta de mi abuelo! –
-¡Sale, pero, apurémonos antes que nos vea mi viejita, tú sabes, como se preocupa por mí. ¡ ya está goteando¡. Oye, pero, la casita de tu abuelo ¿queda muy lejos? –
-Es como una isla muy chiquita, dos ríos pasan alrededor, mi abuelo nunca permitió queentremos solos, siempre nos vigilaba, creo que guardó un tesoro secreto. Mi tío Berno dice que se sienten ruidos muy raros adentro -.
Antón y Will corrían entre risas y gritos hacia la vieja casita. Cuando estuvieron enfrente, gruesos goterones, anunciaban un aluvión. Will, tratando de asustar a su amigo, dijo: - ¡Vamos a entrar a la casa encantada, hola, que salgan los fantasmas, no les tenemosmiedo ! ja ja ja ja -.
La misteriosa cabaña de paredes altas y anchas, con techo de calamina causaba miedo; en el interior había varios cuartos. Al caminar, los audaces visitantes, tropezaban con objetos desconocidos, trofeos, cuadros, una caja tipo baúl, herméticamente cerrada, encima unos bordes relucientes; en fin muchas rarezas que solo conocía Don José María, el abuelo de Will.
Los niñossorprendidos, buscaban y rebuscaban más cosas; en un momento, Antón se quedó callado y exclamó - ¡Mira Will, han aparecido unas letras sobre la caja “ la próxima vez esta caja se…”. Los niños horrorizados se quedaron mudos, de pronto un fuerte estruendo los puso en alerta, habían ingresado, casi simultáneamente, los ríos “ Postereo” y “ Molle”, cargando en sus caudalosas aguas, piedras,arbustos arrancados de raíz, incluso, terneritos y vaquillonas.
Los niños asustados abandonaron despavoridos la vieja casita sin miras atrás, cayéndose y levantándose por los vericuetos del camino. Por verdadero milagro concedido, seguramente, a la mamá de Antón, por sus anticipados ruegos al Creador , ambos pequeños ganaron a la velocidad de las aguas y , como si Dios los hubiera levantado con susángeles, de un momento a otro, estuvieron en tierra firme, en la carretera principal del caserío Santa Marta.
Tras un larga caminata, totalmente mojados y con varios hematomas en sus cuerpecitos, los niños eran buscados por unos y, otros, aguardaban con fe la llegada de los parranderos. Ante el los gritos angustiados de sus padres y el asombro de los vecinos, Antón y Will, muy atemorizadosfueron recibidos de vuelta a casa. Cuando retornó la calma a “Vergelpampa”, por varios meses y años, continuaron los comentarios sobre esta travesura infantil.
Cuando Antón cumplió 21 años de edad se casó con la bella Evilen; procrearon tres hermosas niñas, aunque él tenía como deseo supremo tener un hijo. Con el rápido e inexorable transcurrir de los años, Gatit, su hija mayor, contrajo...