Zapatismo

UNIVERSIDAD DE CHILE
Facultad de Derecho
Depto. Ciencias del Derecho
Antropología Jurídica








PLURINACIONALIDAD Y ZAPATISMO






ÍNDICE

Índice 2
Introducción 3
Pluralismo y Zapatismo 3
Conclusiones 5
Bibliografía 7




















Las sociedades plurinacionales como concepto moderno se caracterizan por garantizar elejercicio de los derechos de todas las nacionalidades que se aúnan en un país y, permitiéndome ir más lejos, podríamos definirlas como multiculturalismos coexistiendo bajo la unidad nacional. Éstas se desarrollan en base a la apertura de la política constitucional, apuntando a sobrellevar las diferencias no solamente étnicas, sino también de género, de edad, de sexualidad y de todos los conflictosdiscriminatorios o que supongan desigualdades en la sociedad. Pero sobre esto hay un alcance que no se puede obviar. Las sociedades son multiculturales pero sólo algunas llevan está definición que conforma la teoría, finalmente a la práctica y con esto comienza la problemática antropólogo-jurídica: las sociedades se estructuraron sobre el ideario liberal de estados-nación que construyeran órdenessociales con principios básicos como la igualdad tanto en el sometimiento a regularizaciones jurídicas como en el plano de la adquisición y garantía de derechos sociales dados por poseer todos, la condición de ciudadanos en una determinada nación. Entonces ¿por qué no dar los mismo beneficios o exigir obligaciones sin excesos o privilegios a poblaciones étnicas, a grupos homosexuales, a mujeres?Para efectos de este ensayo, desarrollaré el multiculturalismo a partir de las diferencias étnicas y raciales; y en esto América Latina es un exponente y actor principal. Las conquistas españolas en territorios de dominio indígena sembraron por siempre la plurinacionalidad en nuestro continente y con ello la necesidad de encontrar soluciones a los conflictos que esto ocasiona, principalmente entre elestado, la “sociedad civilizada” y la sociedad indígena.
Los estados buscan la unidad de su pueblo por lo que deben enfrascarse en buscar métodos que lleven a reconocer la diversidad y aceptarla; porque una cosa deja claro el análisis de la historia de la humanidad: “la diversidad sociocultural o étnica no puede ser suprimida; debemos acostumbrarnos a vivir con ella”1. Y si hay que acostumbrarseentonces hay que encontrar la armonía que un estado de derecho idea.
La “sociedad civilizada” es la que nace de la identidad nacional que se construye a partir de un estado-nación. Este proceso supone una exclusión de las identidades distintas a la de la mayoría y es esta la coyuntura del conflicto real de la plurinacionalidad. Frente a esto cito a Juan Manuel Díaz Galván y su intertextualidaden su artículo: “Identidades o culturas que ante la imposición de una construcción nacional estatal tienen, desde la perspectiva de Kymlicka, tres opciones:
1. Aceptar la integración en la cultura mayoritaria negociando los términos de la integración;
2. Tratar de obtener los derechos y poderes de autogobierno para crear sus propias instituciones económicas, políticas y educativas, embarcados ensu propia forma de construcción nacional concurrente a la cultura mayoritaria;
3. Aceptar su marginación permanente.”2
La sociedad indígena, esa que tiene que adecuarse a nuevos regímenes de gobierno y debe luchar por sus reivindicaciones es que perdedor en esta ecuación. Los indígenas insertos en sociedades modernas valoran la preservación de la democracia directa, las discusiones en asambleas,la rotación de cargos administrativos para evitar la centralización del poder, defienden la idea de la propiedad comunal, el apoyo mutuo y la explotación comunitaria y racional de los recursos naturales. Para que estos sistemas de creencias y valores sean legítimos dentro de una identidad nacional y un estado de derecho deben buscar formas para tener la atención de las autoridades, tan lejanas...