A beautiful mind

Y por fin después de tanto luchar por esa libertad soñada, ay estaba en un archipiélago ubicado en Oceanía, al sur del océano pacifico, sin saber ni media palabra de Tokelauano, y sin un peso en elbolsillo, con desesperadas ganas de tomar y comer algo, puesto que habían pasado largos días sin que sus cuidadores le dieran a probar un bocado.

Cuando se acabaron las energías para seguircorriendo y realmente se dio cuenta que ya no había nadie persiguiéndola fue que empezó a mirar a su alrededor, primero cientos y cientos de luces por todas partes, y esa mezcla de olores que se sentían en elaire, las personas sus rasgos, su manera de vestirse, su comida su idioma, se vio envuelta en un mundo desconocido, perdida y sola.

Estaba anocheciendo y la necesidad de comer se hacía másevidente a medida que pasaban los segundos, pero todo se veía muy diferente asqueroso y caro, al entrar a un supermercado pensó, puedo hablar con alguien para que me ayude con algunas monedas y pueda comprarlo que sea, pero sus rasgos latinos y su vestimenta alejaron a todas las personas, quienes no tienen muy buena imagen de lo que es ser latinoamericano entonces decidió acercarse a una mujer quienparecía que dormía mientras estaba arrodillada al frente de un estante, pero al acercarse y poner una mano en su hombro esta mujer lo malinterpreto y con un lenguaje totalmente indescifrable llamo a unguardia de seguridad, quien si mas reparo decidió llevarla a una estación de policía.

Todo al camino a la estación la mujer proclamaba que era una injusticia que no hacía nada malo, pero al noentender su idioma decidieron ignorarla por completo, entrando a la estación vio un aviso con una imagen de un teléfono y una flecha que señalaba el pasillo, entonces decidió ejercer su derecho a tener unallamada! Pero y a quien iva a llamar?
si su familia se encontraba al otro lado del mundo, desistió de esa idea y prosiguió a darse por vencida, hasta que recordó el leguaje de señas que aprendió...