a la deriva
- Hasta mediados del siglo XVII no encontramos teorías educativas nirecursos para el aprendizaje en sordomudos concretamente, y es Jacobo Pereira (discípulo de Rousseau) quién diseño estas teorías y estos recursos.Siguiendo en el siglo XVII la extrema miseria de Parisllevó a que se convirtiera en una práctica habitual la mutilación intencional de niños de corta edad (era una “selección social”) y de discapacitados.Además el abandono era absoluto para los deficientesmentales y quienes sobrevivían ingresaban en orfanatos, prisiones, manicomios, etc.ordos y ciegos
- Llegamos al siglo XIX, que en su primera mitad se denominó la “época de lainstitucionalización”. Se reconoce la necesidad de atender a las personas con deficiencia procurando incluso su educación, si bien hay que decir que todo proceso educativo no dejaba de ser asistencial (se confundía loasistencial con lo educativo cuando en realidad no es lo mismo). Los centros se construían normalmente fuera de las poblaciones rodeadas de verjas, manteniendo una incomunicación total con el exterior. Enestas instituciones se encontraban personas con distintos tipos de deficiencia que quedaban recluidos de por vida sin posibilidad de recuperar su libertad y sin posibilidad de mantener contacto conotras personas del exterior.
Avanzando en el siglo XIX hay que decir que no se evolucionó nada, sino al contrario, se considero a la persona con necesidades especiales como una amenaza social (dehecho las instituciones seguían hacinadas de gente). Para prevenir esta amenaza se impuso como solución la segregación; se crearon grandes instituciones y ampliaron las existentes pero los recursos...
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