A PROP SITO DE LAS CITAS TEXTUALES

A PROPÓSITO DE LAS CITAS TEXTUALES
1.1 LA ACTITUD DEL AUTOR HACIA EL HÉROE

Para Bajtín, cada momento de una obra se nos presenta como reacción del autor, que abarca tanto el objeto mismo como la reacción del personaje frente al objeto. El autor es el que da el tono a todo detalle de su personaje, a cualquier rasgo suyo en todo proceso de su vida, a todo acto suyo, a sus pensamientos ysentimientos. Si bien en la vida real ciertos actos de una persona no ayudan a construirla en su totalidad, en la obra literaria es la base de la reacción del autor a las manifestaciones aisladas de su personaje, y se da una reacción única con la totalidad del personaje, y todas las manifestaciones separadas tienen tanta importancia para la caracterización del todo como conjunto. Tal reacción frente ala totalidad del hombre-protagonista es específicamente estética, porque recoge todas las definiciones y valoraciones cognoscitivas y éticas y las constituye en una totalidad única, tanto concreta y especulativa como totalidad de conjunto. Esa reacción total frente al héroe literario tiene un carácter fundamentalmente productivo y constructivo.

Pero continúa Bajtín diciendo que la productividaddel héroe no se torna básica y productiva de forma inmediata cuando de una actitud valorativa se desprende la totalidad del personaje: éste mostrará muchas muecas, facetas casuales, gestos falsos, acciones inesperadas relacionadas con las reacciones eventuales, caprichos emocionales y volitivos del autor, y éste último tendrá que avanzar a través del caos hacia su verdadera postura valorativa,hasta que su visión del personaje llegue a constituir una totalidad estable y necesaria. Más aún, el autor transmite la postura emocional y volitiva del personaje pero no su propia actitud hacia a él.

Para Bajtín,”el autor-creador nos ayudará a entender al autor persona real, y sólo después de todo aquello cobrarán una importancia vislumbradora y totalizadora sus opiniones acerca de la creación”1.En nuestro caso, consideramos que no es necesario abordar el sentimiento del autor persona real para acercarnos a la obra. Si referenciamos esta instancia, es más para indagar sobre el autor-creador.

Si bien el autor a veces convierte a su personaje en su portador inmediato para difundir sus propias ideas (que no es el caso de García Márquez) entonces estamos en presencia de un acto decreación no estética. No obstante lo anterior, existen ciertos actos somáticos, ciertas costumbres, que deslindan al autor y dan la idea de totalidad al personaje: la idea se ajusta entonces, en palabras de Bajtín, “a la individualidad completa del personaje, en la cual su aspecto, sus modales, las circunstancias absolutamente determinadas de su vida, tienen tanta importancia como sus ideas”. (p. 18)(…)


En la pluralidad de voces que entraman el discurso narrativo de El otoño del patriarca, citamos la ‘voz’ de Patricio Aragonés, quien tuvo la honradez de cantarle al presidente lo que todo el mundo decía de él “que usted no es presidente de nadie ni está sentado en el trono por sus cañones, sino que lo sentaron los ingleses y lo sostuvieron los gringos con el par de cojones de su acorazado”.2Mientras en El otoño tal aseveración refleja en parte el síntoma del curso que han seguido nuestros pueblos, semejante acusación contra el general Simón Bolívar es falaz, cuando se le recrimina de querer el trono para entregárselo a un príncipe europeo. En todo caso, dentro de las aspiraciones liberales del Libertador, nada era más conservador que el hecho de disfrazar una monarquía bajo el título depresidente vitalicio que él inventó. Pero, no obstante algunos errores que él mismo reconoce, lo más importante en su criterio, y por lo cual quiso perpetuarse en el poder, era para mantener la independencia y la unidad. Esta última se rompió y la independencia, no se ha logrado.

El manejo de las finanzas y de la deuda externa siempre fue motivo de preocupación. Al médico Gastelbondo...