¿A quién/es le sirve la escuela?

Una de las preguntas frecuentes, asociada a las funciones de la escuela, ha sido el interrogante en torno a si la escuela sirve, a quiénes y para qué.
Respecto de a quiénes sirve la escuela, lainquietud es que si solo es pensada como cerco de contención para las nuevas generaciones, no las está reconociendo como sujetos educativos.
Es una cuestión que nos invita a pensar y a “volver a mirar lacotidianeidad escolar” como dice Sandra Nicastro. Atravesamos tiempos en los cuales algunos de nosotros necesitamos volver a mirar, a nombrar, repreguntarnos por algunos significados…tomar posición eintentar ponerle palabras, palabras propias y de otros, hacer circular sensaciones también compartidas y analizar algunas experiencias que guardan sentido.
Que la organización escolar como talmerece revisiones profundas no es nada nuevo. Pero más allá de sus formatos contamos con espacios escolares que significan para muchos niños y jóvenes “el lugar de lo posible”, aquel que aún cuenta con lapotencia para quebrar un destino casi innombrable. Cuando esto ocurre, cuando la escuela se presenta para tantos como “un lugar de posibilidad”, la política que en ese escenario se despliega tiene quever con pensar en la igualdad como punto de partida, con plantearse preguntas sobre las prácticas y los encuadres de trabajo, las modalidades de participación y las tramas que anudan las relaciones.Rafael Gagliano afirma que “la sensibilidad de las nuevas generaciones está más orientada a inventar nuevas realidades que a revolucionar o perseverar en los mundos de sentido en que habitaron susmayores”. Educar, en estas circunstancias, implica pues, un plus de compromiso con la innovación, la experiencia en redes y la confianza continua y fluida en los sujetos y las organizaciones queaprenden de sí mismas.
Las escuelas pueden funcionar si conocen y reconocen a sus estudiantes y los potencian en proyectos de vida y trabajo: esta tarea es quehacer de muchos, provistos de todos los...