¡ADIÓS ESCUELA!

¡ADIOS ESCUELA!
Hay momentos en la vida de los hombres definitivamente alegres, unos, decididamente triste otros.
Este día, distinto por su contenido, reúne en solemne fusión decertidumbre y fuerza la tristeza del adiós y la alegría de la victoria, porque en el vemos coronado el esfuerzo, los maestros que hoy partimos.
Compañeros: la dirección de estaescuela quiso por mi intermedio brindarnos esta despedida. Misión por cierto, que me llena de generosa satisfacción.
Cuando los años pasan, y somos aun estudiantes adolecentes, la escuelaes el cansancio, la fatiga y hasta el aburrimiento. Pero cuando un alumno culmina su carrera y ya es maestro, los días de clase se hacen corto, las tareas diarias se hacen dulce yllevadera y las horas pasan sin sentirlas.
Estos muros austeros que vigilaron con lealtad y con vidrioso celos nuestras confidencias de juventud, guardianes de nuestras inquietudes,aliento perenne de duda y regazo vencedor en las horas de llantos, quieren también orquestar sus tonos en este adiós trascendental y simple.
Nuestros padres podrán sentirse orgulloso denosotros. Es nuestro primer triunfo. A ellos ofreceremos esta victoria, a ellos que siguieron de cerca nuestras inquietudes sanas, llenas todas de impetuoso sueños.
A nuestrosprofesores queremos expresarle este agradecimiento por este legado de fe y nos enseñaron, que seremos leales a su ejemplo.
Bendita seas, escuelita
Porque pusite en mi ignorancia
la luzde la sabiduría,
y me enseñaste a ser mejor
y amar el bien y la justicia;
porque con mano generosa
sembraste en mi alma la semilla
del patriotismo y del trabajo,
de la amistady la alegría;
porque la senda del deber
me señalaste un día;
porque a tu amparo bienhechos
se iluminó toda mi vida,
!bendita seas, escuelita!
Queridos compañeros sean felices.