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Actividad 1
Narra una historia a partir de una imagen.

Recuerdo ese día. Primero de Agosto, estaba alistando mis cosas. Dentro de pocos días empezaría mi segundo año en la preparatoria.Cuadernos, listo. Mochila, lista. Uniforme, listo. Zapatos… Rayos, aún no estaban listos.
Me dirigí a una zapatería, dispuesta a encontrar unos de mi agrado, lo cual sería realmente difícil.
Ese díano.
Unas zapatillas en el aparador más alto llamaron mi atención. Eran realmente extrañas, pero hermosas (en éste punto me di cuenta que los zapatos escolares habían pasado a segundo término), así quepregunté cuanto costaban.
Dos mil.
Demonios, pensé, eran realmente caras, pero valdría la pena, ya imaginaba a todas admirándolas. Jamás tendrían algo así. Pero además de eso, nuncahabía sentido algo semejante hacia nada, menos hacia un simple par de zapatillas. Era una atracción nueva para mí.
Era par único… Y de mi talla. No cabía duda que esas zapatillas estaban hechaspara mí.
Cuando llegué a casa, me las probé de nuevo, estaban calientes. Traté de quitármelas pero no pude, entré en pánico. Una luz emergió de ellas y por un segundo, fui incapaz de ver lo queme rodeaba.
Abrí los ojos.
No estaba en mi habitación. No estaba en casa. Un ser extraño estaba de pie frente a mí. Sus ojos eran enormes, abarcaban casi una tercera parte de su cabeza. Sucuerpo era delgado, seguro no superaba los treinta kilogramos, y falta lo peor, su piel era gris. Sus piernas eran esqueléticas y sus pies… ¡Dios mío! Sus zapatillas eran idénticas a las mías.Llegaron más y conversaron entre todos. Tenía miedo. Estaba ahí, indefensa. En cualquier momento podrían matarme, pero en vez de eso, sentí cómo me desvanecía, todo a mi alrededor se volvía borroso,creí que habían decidido que era inútil.
Desperté y estaba en mi cama, eran las dos de la mañana. Miré a la ventana y divisé un objeto merodeando por el cielo. Brillaba, era imposible que...