T Eliges

Tú eliges
Llámame Sean.
Soy el autor y me alegra que estés aquí. No te preocupes, este no es otro de esos libros aburridos; es diferente. Está escrito de manera especial para adoles­centes y trata de tu vida, tus problemas, tus cosas. También contiene muchas ilustraciones estupendas (tuve que contratar a varios creadores y pagarles una fortuna porque yo no hago ni un garabato).
Pero, sobre todo,gira en torno a esta idea:
Hay seis decisiones clave que tomas durante la adolescencia, las cuales pueden construir o destruir tu futuro. Así que elige con sabiduría y no las eches a perder.
Sin embargo, si llegaras a equivocarte, no es el fin del mundo. Simplemente vuelve al camino con rapidez y empieza a tomar decisiones más inteligentes.
Hoy en día ser adolescente es más difícil que nunca.Aunque quizá tus abue­los hayan tenido que sortear muchas dificultades para ir al colegio, los retos que se te presentan a ti son distintos; por ejemplo, los medios no dejan de bombar­dearte, fiestas con drogas, pornografía en Internet, abuso sexual, terrorismo, una competitividad a escala global, depresiones y una presión enorme por parte de tus compañeros. ¡Es un mundo totalmente distinto!

Aunquesigo haciendo travesuras, ya no soy un adolescente, pero recuerdo vívidamente los altibajos por los que pasé. La mayoría de mis problemas empezaron al nacer. Mi padre decía: «Sean, cuando naciste tenías unos mofletes tan grandes que el doctor no sabía dónde darte». No estaba bromeando.

Deberías ver mis fotos de bebé. Me cuelgan los mofletes como globos llenos de agua. Ya te imaginarás que semetían conmigo todo el rato.
Una vez estaba con los niños de mi calle saltando en nuestro trampolín. Ju­gábamos a imitar los movimientos que había hecho el anterior, y era mi turno. Susan, mi vecina, no pudo evitar decir lo que todos pensaban:
Mirad cómo rebotan los mo­fletes de Sean. Son tan grandes...
David, mi hermano menor, trató de defenderme:
Pero no son de grasa. Son puro músculo.
Su defensafracasó y todos se rieron de mi nuevo apodo: «Mofletes musculosos».
Mis problemas continuaron en secundaria. He decidido ol­vidar casi por completo el primer curso. Lo que sí recuerdo es que to­davía tenía unos mofletes enormes y un chico de segundo llamado Scott no dejaba de meterse conmigo para que nos pegáramos. No sé por qué me molestaba, nunca habría peleado con él. Tal vez porque estaba segurode darme una paliza. Me esperaba en el pasillo con sus amigos y me retaba después de clase de álgebra. Yo le tenía miedo y le rehuía, pero un día me acorraló.
Oye, Covey. Sí, tú, gordo maricón. ¿Por qué no peleas conmigo? —No sé...
Entonces me pegó muy fuerte en el estómago y me dejó sin respiración. Yo estaba demasiado asustado para devolverle el golpe. Después de aquello me dejó en paz. Pero mehabía humillado y me sentía como un perdedor. (Por cier­to, ahora soy más corpulento que Scott y sigo buscándole... ¡Es broma!).
Cuando entré en el instituto, me llevé la grata sorpresa de que me creció la cara y que mis mofletes se habían reducido, pero hubo otros problemas. De re­pente tuve que tomar decisiones importantes para las cuales no estaba listo. En la primera semana me invitaron aunirme a un club con estudiantes de último año que bebían mucho. Ni quería unirme al club ni ofenderlos. Empecé a hacer nuevos amigos... y a ver a todas esas chicas nuevas. Una me gustó. Era guapa y agresiva, lo que me emocionaba y atemorizaba a la vez. Tenía tantas preguntas en la cabeza... ¿Estaba bien que me gustara esa chica? ¿Con qué amigos debía salir? ¿A qué clases debía ir? ¿Debía ir a ciertafiesta? ¿Cómo podía combinar escuela, deportes y amigos? En ese momento no lo sabía, pero esas fueron algu­nas de las decisiones más importantes que he tomado en la vida.
La idea de este libro surgió cuando hice una encuesta entre cientos de ado­lescentes de muchos lugares. Les envié la pregunta: «¿Cuáles son tus mayores retos?», y he aquí lo que algunos respondieron:

Estudié todas las...