Adicciones Y Escuela

Adicciones y Escuela

Los últimos años mostraron un crecimiento exponencial del fenómeno de las adicciones en todo el mundo y, como parte de él, en nuestro país. Esto sucede a la vez que lassociedades se vuelven más competitivas e individualistas, implicando no sólo un cambio en las costumbres, sino un fuerte retroceso en la construcción y existencia de instancias de socialización ycontención, resonando esencialmente en tanto constitución de identidades colectivas.
Así, las identidades que se construyen en esta época se refieren, en general, a la inserción en el mercado y a lasposibilidades y perspectivas que éste configura diariamente, siendo su común denominador la rapidez, lo efímero. Estas identidades se erigen alrededor de objetos, de consumos diversos, de marcas de ropa, autos,etc. Todos estos "bienes" y "cosas", son más seguros y cargados de certeza que la propia cultura ya que es la civilización la que les otorga el sentido, su funcionalidad, sus atributos; y es a travésde estas cualidades que se crea, como único juego posible, el de la competencia, muchas veces en forma de guerra de todos contra todos en pos de la adquisición de más y nuevos objetos, de seguridadespasajeras, cuya presencia brinda cierto nivel de satisfacción que se diluye rápidamente. De ahí la necesidad de más objetos, más “consumo”, más momentos “pequeños” de felicidad.
A su vez, elpresente nos muestra una fuerte fragmentación de la sociedad, con la sensación de que cada vez nos sentimos más separados del "todo" social. La pérdida de sensación de totalidad es uno de los malestares mássignificativos de esta etapa de la historia de Occidente. El mundo se nos presenta dividido, escindido, con falta de sentidos. En este marco ¿No será que las drogas nos prometen, al igual que losobjetos, una efímera reconstitución de ese "todo" que se perdió? En definitiva, ¿Las drogas no se han convertido en un objeto de consumo más? Si pensamos de este modo, vemos a la drogadicción como un...