aportaciones de México a la química

 Mario José Molina Henríquez 



Nació en Veracruz, México, en 1942. Desde muy temprano, como estudiante de preparatoria, se sintió seducido por lainvestigación científica al contemplar por primera vez un protozoo a través de su microscopio de juguete. Además de su actividad docente, el Dr. Molina ha destacado por sus investigaciones sobre elproblema del medio ambiente. En 1995 recibió el Premio Nobel de Química. Molina fue el descubridor del agujero de la capa de ozono y el peligro de los clorofluorocarbonos (CFC), empleados en aerosoles,tanto industriales como domésticos. Su hallazgo fue emocionante pero a la vez sombrío: se daba cuenta que había descubierto un problema global que amenazaba el futuro de la humanidad. Así pues,depositario de una gran responsabilidad, se vio en la obligación de divulgar lo antes posible su descubrimiento. El 28 de junio de 1974, publicó sus descubrimientos sobre esta materia en la revista Nature yasesoró a empresas públicas y privadas. El gas es tan estable que, una vez liberado, es arrastrado lentamente hasta la atmósfera. Hasta aquí, el gas no es peligroso. Sin embargo, al ser bombardeado porlos rayos ultravioleta del sol, el gas se descompone y libera cloro, que es el componente que realmente venenoso, el responsable de la destrucción de las moléculas de ozono, saltando de unas a otrascomo si fuera un serial killeratmosférico. Y es que una simple molécula de cloro puede viajar durante un siglo por la atmósfera, eliminando una a una hasta 100.000 moléculas de ozono.El daño ya ha sidotan elevado, que si ahora mismo dejáramos de emitir CFC a la atmósfera, el agujero detectado en la Antártida no desaparecería hasta el año 2100.






Luis Ernesto Miramontes

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