barbas y melenas

BARBAS Y MELENAS
México, el país donde no se pueden aplicar los esquemas sociológicos mundiales muy fácilmente, por sus peculiaridades, por su “Revolución”, su “clase media”, etc. etc.
Sin embargo muchísimos fenómenos sociales también los tenemos aquí.
Y por eso, cuando en la fábrica, en la oficina, en la escuela o en alguna reunión se toca el punto, lo primero que hacemos los jóvenes esesbozar una sonrisa… nuestras barbas y melenas siguen diciendo algo a los lampiños o bien arreglados dirigentes del mundo.
Te concedo, amable lector, tu repugnancia a los que añaden suciedad al signo, y admito tus críticas a esta moda adolescentesca, protesta mafiosa, o medida antiestética…y de que juzgues de autodefensa o racionalismo estas líneas, al finalizar.
Pero quisiera que tú también meadmitas, al menos en posibilidad, mis reflexiones siguientes, teniendo en cuenta que sólo me refiero a esto y no al hipismo en general, ni a otros símbolos.
Y es que resulta interesante ver que esto se suscitó ante un modo de oropel, capitalismo, burguesía, odio y guerra, que ustedes los adultos nos ofrecían.
Un mundo de formalismo, de intereses creados, zancadillas, hipocresía y utilitarismo.
Esgracioso cuando el gerente, el jefe de personal, el inspector de escuelas o el superior religioso, tan peinadito, con pelo cortito, sin asomo siquiera de patilla, ni de barba, ni de… le sonríen y le dicen que harán lo posible, que usted vale tanto, y hace tanto, y mientras ya han girado una circular contra usted, o lo chisparon del trabajo, o lo difamaron, o votaron en contra suya, o comentaron deusted lo peor.
Y más gracioso aún cuando ese jefecillo perfumadito y arregladito, que regresó de que le pincelaran las sienes de su cabello en la “boutique”, para aquello del “respetillo”, le habla y le dice: amigo, compañero, colega, hermano… y le hace hablar, y esas palabras serán después para su muerte.
Y la graciosidad termina cuando eso lo ve usted a nivel empresa, nación, inspectoría, o anivel internacional, donde por ejemplo, en lugar de llamarle al pan, pan y al colonialismo, colonialismo, le nombran graciosamente “países desarrollados”.
Y se llena de risa la boca cuando sabe usted que en una reunión importante emplearon tiempo para hablar de “barbas y melenas”… mientras se está hundiendo su empresa, su familia o su colegio.
¿No cree usted la importancia de estudiar mejor elpor qué de los accidentes, fracasos, deserciones…? O de hablar de las necesidades auténticas para los obreros, trabajadores o miembros…
De prever el peligro que se avecina cuando en la pirámide de relaciones, no se encuentre en su trabajo, oficina o equipo la base media, el eslabón juvenil, medio entre dirigentes y novatos, entre aprendices y gerentes, entre viejos y jóvenes, en cualquier empresaesto trae consecuencias.
Usted podría imponerlo por fuerza, dará un edicto para su empresa, colegio o congregación y se cumplirá por obligación, porque usted tiene el “poder ejecutivo y judicial”, pero llegará el tiempo de saltar las trancas… ¿no cree usted que esto será perjudicial y contraproducente?
Después de todo, quizá usted nunca ha tenido la osadía de dejarse “barbas y melenas” porqueya está estructurado, momificado, condicionado.
¿No será que teme usted a la sociedad, al que dirán, a la gente y nunca pudo hacer por falta de valor, de época… o de materia?
Que fabuloso que usted, amable lector de la antigua ola, peinadito al “casquete corto”, bien perfumadito, listo y de barba partida y con ojos de cielo, pudiera entenderse con nosotros, desaliñados, barbones o melenudos, enalgún valor auténtico y más profundo como la sinceridad, la autenticidad, el “hombre” en sí, dándonos cuenta que lo otro son formas, es algo accidental, es formulismo.
Es hora de salvar un mundo tan hermoso que se está perdiendo en lo exterior, en lo inauténtico, en la espuma.
Es hora de que trabajemos unidos jóvenes y adultos.
Después de todo, y si algún día puedes, allá lejos, en vacaciones,...