Bolaño y Cortázar

“Las babas del diablo”, de Julio Cortázar, es un texto que, entre sus lectores, ha suscitado una duda que ni extensos análisis han podido disipar: ¿Quién narra? Algunos apuntan a que es RobertoMichel, fotógrafo, personaje principal de la historia. Otros apuntan a que es su cámara, mientras otros señalan que es la imagen que su cámara ha capturado. La interpretación de la editora Susana Jakfalvies un tanto distinta:
Hay un intercampio constante e imperceptible de puntos de vista. Cada uno de éstos no comporta una deformación fantasmagórica de la realidad, sino estadios que se complementany superponen en un movimiento de acercamiento y de corrección de la realidad […] ¿Por qué pensar solamente en la posibilidad de uno o varios puntos de vista, por qué no aliarlos a todos? (Jakfalvi42-43)

Históricamente, aquellos que no simpatizan con la literatura hispanoamericana la han criticado por ser una literatura impura, que mezcla su oficio estético con la política y problemassociales. Según Edmundo Paz Soldán, el escritor hispanoamericano debe mantener los ojos abiertos, ser un testigo elocuente y casi incontrovertible. Debe, sobre todo, comprender que la literatura es un oficiopeligroso porque pone en peligro la imagen de quien se escribe, que no en pocas ocasiones, es una persona con poder. En su ensayo, el autor coloca a Bolaño y Cortázar en el mismo plano, en el sentidode que son autores política y socialmente comprometidos.

Hay cuentos que se prestan muy bien para ser representados cinematográficamentey Julio Cortázar no es ajeno a esto. Cuentos suyos como “Elperseguidor”, “Casa tomada”, y desde luego, “Las babas del diablo”, han sido adaptados a películas. Partiendo de esta premisa, Raquel Lloreda Díaz escribe, en referencia a “Las babas del diablo” sobrecómo este cuento es eccéntrico tanto en lo textual como en lo visual:
“En este cuento se transgreden los límites de la narración tradicional y se incorporan perspectivas narrativas estrictamente...