carta a garcia

LA CARTA A GARCÍA


PRÓLOGO

Nadie puede cambiar a nadie, reza cierto axioma de la vida cotidiana, lo máximo que una persona puede hacer al respecto es invitar al cambio del otro con su propio cambio. El cambio surge de las iniciativas personales, que al recoger el sentir del otro, lo influyen y lo conducen a lograr el mejoramiento personal y colectivo.

¿Cómo están administrando laspersonas su vida?, ¿cómo canalizan y dirigen sus energías?, ¿cuáles serán las opciones más sanas y productivas para vivir la vida constructivamente? La caña a García, un texto corto, simpático e interesante, le permitirá al lector examinar su situación desde un punto neutro, pero optimista.

Por ese camino surgirá una nueva actitud que acepta los retos altivamente, una disposición al cambio y alcumplimiento cabal de las metas propuestas, una visión del mundo en la que los problemas adquieren su tamaño real, sin exageraciones.

Con mucha facilidad nos ensimismamos en un mundo de fantasía que evoca el pasado o sueña con un futuro jamás previsible. Nos desconectamos de la realidad olvidando que lo único que podemos administrar, controlar o disfrutar es el momento presente. La carta a García,como lo decíamos anteriormente, es un punto de partida para los triunfadores, para Ios que aceptan los retos, para los que se ponen metas y las cumplen, para los que ven el futuro con los ojos de la posibilidad.

Según las observaciones hechas por muchos pensadores, el ser humano se caracteriza por su inusitada inventiva individual, pero cuando se trata de llevar a cabo proyectos mancomunadostodo parece sumirse en la oscuridad. La carta a García se muestra entonces como un derrotero en el trabajo de equipo. Los logros, vistos así, toman el matiz del trabajo con los demás y para los demás, un trabajo que ya no es en grupos amorfos, sino en equipos organizados y completos que gustan de lo que hacen y con quien lo hacen La dificultad en la convivencia en empresas e instituciones, comienzapor la inútil cantidad de energía que se malgasta en las rivalidades y envidiad profesionales; la competencia a la que nos ha llevado e! curso dé la vida actual no es más que un obstáculo que nos aleja de la felicidad personal.

Conscientes de esa panorámica, los líderes y los hombres eficaces muestran el camino que lleva al éxito, hacen algo así como aportar las direcciones para encontrar aGarcía. Este breve texto es un mensaje Heno de optimismo y fortaleza para el futuro, una muestra de lo que puede lograrse aún en los tiempos más difíciles.




APOLOGÍA

El pasatiempo literario que va a leer usted, amigo, La carta a García, fue escrito de sobre mesa, una tarde, en el corto término de-una-hora. Esto sucedió el 22 de febrero de 1899, natalicio de Jorge Washington y en marzo delmismo año ya se liaría publicado en la revista Phitisüne. Fue algo que brotó caliente de mi corazón y lo escribí tras un día empleado en la pesada faena de excitar a infelices sumidos en los limbos de una inacción criminal a que se tomasen hombres auténticos, radiactivos.
Pero la verdadera idea creadora brotó de labios de mi hijo Bert, cuando en el curso de la conversación entre taza y taza deté, narro cómo el verdadero héroe de la guerra de independencia de Cuba había sido Rowan.

"Sí, dijo mi hijo, porque Rowan fue quien en la hora oportuna, culminante, llevó a cabo el hecho único, necesario: llevar él mensaje a García".

La frase me hirió como un rayo. Sí, exclamé, el muchacho tiene razón; el héroe es siempre aquel que cumple su misión, el que lleva la carta a García. Corrí a miescritorio y de un tirón de uno a otro cabo, escribí: La carta a García.

Tan poco casó hice de mi escrito, que fue publicado en la revista sin encabezamiento siquiera.

La edición salió y empezaron a llover pedidos por docenas, y por centenas de ejemplares de la revista, y cuando The American News Co., pidió mil ejemplares, pregunté Heno de asombro a uno de mis ayudantes qué era lo que en...