Consideraciones Intempestivas sobre Derecho Ambiental
Históricamente el Derecho ha surgido como una respuesta necesaria a escenarios sociales, políticos,culturales y económicos. La imperiosa necesidad de regular diversas situaciones y conductas hizo imprescindible la diversificación del Derecho como disciplina y como ciencia.
Al igual que la humanidad ha idocambiando y transformándose a lo largo del devenir de la historia, el Derecho ha ido de la mano evolucionando y adaptándose a los tiempos y a las necesidades que conllevan. De esta misma evoluciónsurgió el Derecho Ambiental, como respuesta a la creciente preocupación y concientización colectiva sobre el evidente deterioro del Medio Ambiente producto de siglos de incesante explotación desmesuradade los recursos naturales y a la ignorancia endémica que ha relegado el tema a un plano irrelevante.
En el caso patrio nuestra actual Constitución, nacida en los albores del presente siglo recogeen su Artículo 127 del Capítulo IX toda una declaración de intenciones a favor de la causa ambientalista y de la imperiosa necesidad de actuar en consecuencia para preservar nuestro entorno natural, nosolo para los que actualmente habitamos este planeta sino también para aquellos que han de heredarla en el futuro próximo.
Lamentablemente una cosa es lo que recoge nuestra Constitución y laconsecuente Ley Orgánica del Ambiente, y otra bien diferente la realidad cotidiana con la cual nos topamos al salir diariamente a la calle. De esta manera es común observar cómo se sigue desperdiciandoenergía y agua en grandes cantidades en cualquier rincón de nuestro país, también si nos adentramos en el medio rural podemos percatarnos de los estragos que generan las explotaciones ganaderasindiscriminadas las cuales generan un importante y notorio deterioro de los suelos sobre los que se desarrollan, siendo este aun mayor cuando se realiza en las cumbres montañosas.
En mi caso particular...
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