Consieraciones en torno a la defensa territorial y al conflicto agrario. Formas de lucha en Oaxaca

Primer Congreso Internacional
Los pueblos indígenas de América Latina, siglos XIX-XXI
PANEL 105: La resistencia callada. Organización comunitaria.
Consideraciones en torno a la defensa territorial y el conflicto agrario. Formas de lucha en el estado de Oaxaca

Carlos Moreno Derbez.

Presentación
La conflictividad agraria en Oaxaca lleva varios siglos de tensiónpor el dominio de los territorios. La parte agraria es una de las expresiones de los desencuentros territoriales entre pueblos y comunidades que comparten la misma filiación étnica, como es el caso de Mixes, o en donde comparten dos o más grupos como es el caso de la región de la sierra sur donde confluyen Chatinos, Zapotecos y Mixtecos.
Los enfrentamientos no dejan de sucederse y podríaseñalarse que hasta recurrentes son desde un ejercicio cíclico. De alguna manera, se puede hipotetizar cualquier cantidad de posibilidades para ubicar esta condición cíclica y construir una concepción que se aproxime a la teoría del conflicto agrario entre pueblos y comunidades originarios en Oaxaca.
Esta tarea, podría ser motivo de un seminario permanente desde una institución académica, porque ya no esposible sostener que, entre otros argumentos:
1.- El problema no es agrario porque está resuelto jurídicamente. Es un problema social, y en el mejor de los argumentos: Se trata de un problema social-agrario.
2.- El problema es producto de los caciques locales.
3.- El problema es consecuencia de que no se tomaron en cuenta los títulos primordiales.
4.- Las confrontaciones son producto de queel gobierno no respeta el estado de derecho ya que la propiedad ya se resolvió en tribunales y no saca a los invasores.
5.- El gobierno propicia los conflictos para que gane su partido.
6.- El interés del gobierno es facilitar la “tierra de nadie” para que la producción de cultivos de “alto rendimiento” se mantengan y con ello, del negocio.
7.- La globalización facilita los enfrentamientospara contar con un espacio adecuado para la explotación de los recursos naturales y la introducción de megaproyectos.
8.- Lo que los tribunales agrarios y demás órganos jurisdiccionales nunca han entendido es que los territorios de los pueblos indígenas no fueron respetados suficientemente en base a sus títulos primordiales.
9.- Las organizaciones sociales y políticas usan al conflicto agrariocomo parte de la sobrevivencia de su estructura de dirección política.
10.- Los arreglos que pudieron hacer los abuelos para la distribución y entrega de nuestro territorio son producto de una maniobra a la que fueron sometidos y engañados.
Estos diez argumentos son recurrentes en los encuentros y desencuentros que cotidianamente se viven al compartir el conflicto, sin dejar de considerar que conalguna frecuencia se acusa al órgano conciliatorio o a quien está tratando de ejercer la mediación, de haber tomado partido y de ser preferente y parcial con alguna de las partes.
La necesidad de salir de esta argumentación recurrente e improductiva tiene que ver con la valoración objetiva de lo que es necesario retomar para acercarse a revisar a profundidad lo que implica el conflictoagrario, la diferencia territorial o la confrontación por los espacios de sobrevivencia que, a fin de cuentas son sinónimos.
Por ello, esta propuesta retoma una serie de consideraciones para llamar la atención de algo que debemos trabajar quienes hacemos en este campo de relaciones Antropología Aplicada y quienes desde la academia se dedican al trabajo de análisis que transita en un grupo cuyaproductividad además de ser muy rica, difícilmente se tiene acceso a ella.
Por lo anterior, la pregunta que queda en el aire está en relación directa a la invitación a la reflexión de este panel. ¿En el conflicto agrario, territorial o de espacios vitales para los pueblos indígenas existe una resistencia callada? O más bien se trata de una demanda a gritos que no requiere de formas de...