Crónica

Crónica
Arribé a la fiesta con una falsa sonrisa en mi rostro. No estaba de más, sabía que ahí te encontraría divagando, divertida, hermosa… Me acerque con cautela tratando noalterar la paz que te rodeaba, que inútil fidelidad la mía, pretendiendo que al no molestarte, regresaría a mis brazos.
Hermoso el momento divino en que nuestras miradas se cruzaron, todopara luego mirar tu gesto seco y cortante y tu manera de mirarme se tornó distante. La música sonaba bastante agradable, ¿La comida? Bueno, si quiera la probé, no podía evitar teneruna mirada de bobo enamorado, contemplándote. Más que amor, tu recuerdo me traía sentimientos de placer. Que tonto, que pérdida de tiempo, si tan solo supieras que el estilo con el quevisto el día de hoy es solo para apantallarte. Tú te mirabas bella en ese vestido rojo a la moda, infinita excitación el revivir aquel beso tuyo. Tanta felicidad me daba el hecho deverte, que cuando menos pensé, la adrenalina me llevo al borde, un tatuaje de tus ojos, y no unos ojos cuales quiera, unos almendrados ojos verdes. Que no me basto la pobre solidaridaddel creador como para tenerte eternamente. Es esa la razón de por qué te inmortalicé en mi piel, una clara colorida y eterna imagen.
La confianza que me abordaba era gigantesca, talenergía me daba la fuerza para ser feliz sin ti. Mi corazón se detuvo por unos segundos, pasaste junto a mí, de nuevo tu frialdad me devolvió a la tierra, basta de romance, me dije a mimismo aguerrido a una falsa e imposible oportunidad de regresar a besar esos labios tuyos.
El misterio me carcomía, esa sensación de ¿Acciono o espero que me pida ser su amigo? Con laamistad no lograría mis objetivos, entonces era momento de tomar mi individualidad terminar con la alucinación y escribir estas notas que se inspiran en sus claros ojos verdes.