Cuarto Periodo Derecho Romano
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CUARTO PERIODO
DERECHO ROMANO
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01/10/2013
REYES INGA VICTOR
CUARTO PERIODO
DE LA MUERTE DE ALEJANDRO SEVERO A LA MUERTE DE JUSTINIANO
Al vivo resplandor con que había brillado la jurisprudencia bajo el reinado de Alejandro
Severo, sucede súbitamente, y por decirlo así, sin transformación apreciable, una profundaobscuridad. Papiniano, Paulo, Ulpiano, Modestino, parecen haberse llevado al sepulcro el
secreto de esa maravillosa dialéctica que, segun expresión de Leibnitz, apenas cede a la
exactitud de los geómetras.
La primer causa de esta brusca decadencia fue, sin duda alguna, la espantosa anarquia
militar que, después de la muerte de Alejandro Severo, desgarró durante cincuenta años el
Imperio romano;anarquía de que se aprovecharon los pueblos del Norte, los bárbaros, para
inquietar a las provincias y devastar las fronteras. Los pretorios en Roma, las legiones en
las provincias, levantan y deponen voluntariamente diez y siete emperadores en el curso de
medio siglo. Diocleciano, y después de él Constantino, tratan de detener esa
desorganización y devolver la vida a ese gran cuerpo del imperio quecae en disolución. Sus
esfuerzos y su genio consiguen únicamente retardar una caída inevitable en adelante.
Y es que existen en el seno de la sociedad romana dos causas incesantes de aniquilamiento
y de ruina que hemos advertido ya en Italia y que han pasado a las provincias, donde les ha
dado la fiscalización un acrecentamiento incurable: queremos hablar de la concentración de
la propiedad yde la extinción progresiva de las clases medias. Para satisfacer las
necesidades de un lujo asiático, y para comprar la fidelidad siempre dudosa de los ejércitos,
se han visto obligados los emperardores a multiplicar los impuestos. Habiendo llegado a ser
excesiva la contribución territorial, ha ocasionado el abandono de las tierras menos fértiles.
Y como no podía retroceder la avidéz delfisco, se ha tomado el partido de transportar a los
campos fertiles el Impuesto de los campos incultos. Aumentado por este deplorable sistema
el impuesto excesivo general, obliga a muchos ciudadanos a abandonar aun las tierras
productivas. Esta desgraciada situación recae con todo su peso sobre los pequenos
propietarios, y en efecto, los decuriones en todos los municipios son los responsables delimpuesto, y los senadores, los magistrados municipales por su dignidad, los militares por su
privilegio, el clero por el honor del sacerdocio, los cohórticos y la plebe por su miseria, se
libran de las cargas municipales. No queda, pues, para soportar la enorme responsabilidad
que afecta a las funciones curiales, más que la clase media. Así, se la ve desaparecer
rápidamente, tributorumvinculis quasi praedonum manibus extrangulata, dice Salviano, De
gub. Dei., lib. IV.
En vano se ofrecen las tierras desiertas a quien quiera tomarlas; las leyes que hacen entrar
en la curia al menor plebeyo en cuanto posee veinticinco yugadas (jugera), hacen rehusar
estos vastos dominios, cuya renta total se hubiera llevado solamente el fisco.
En vano se conceden diversos privilegios del derechocivil a los curiales para retenerlos en
la curia. En vano se hacen leyes para inclinar al matrimonio a ciudadanos que se abstienen
de uniones legítimas para no perpetuar su raza desgraciada; leyes prohibiendo a los padres
exponer o vender a los hijos a quienes no pueden mantener; leyes prohibiendo a los
decuriones expatriarse entre los bárbaros o hacerse colonos de los ricos. Estas leyes son...
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