dfghjk

Eran las 10 de la noche, más o menos, estaba sentada en el sillón de la estancia con mi mama viendo fotografías antiguas. Mi mama era muy melancólica, así que no lo hacíamos seguido, pero esa vez me entro la curiosidad de preguntarle cómo era ella de joven. No me la imaginaba, mi mama era la típica señora seria que no solía divertirse. Yo tenía 16 años y no podía pasar una hora callada, hastamis amigas más serias se ponían locas de vez en cuando, era inevitable. Mi madre no hablaba mucho de su juventud, yo sentía que se avergonzaba de ello, ¿Qué habrá hecho? Bueno, fuera lo que fuera, ya había quedado en el pasado, o al menos eso pensaba yo. Tal vez no era nada.
Vivíamos solo ella y yo, en una pequeña casa, en una gran ciudad, rodeadas de gente que parecía no notarnos. Y eso noimportaba, así éramos felices, o eso era lo que mi madre trataba. Siempre fui la típica niña de buenas notas y buen comportamiento, era la consentida de los maestros y me sentaba al frente de la clase; tenía pocas amigas así que no salía mucho ni hablaba por teléfono constantemente, como las otras chicas de mi clase lo hacían. Mi mama decía que no importaba, que a las niñas que solo les importaba versebien y coquetear con chicos no les esperaba un buen futuro, siempre me decía que a ella no le gustaría que me distrajera por cosas inútiles, que siempre tenía que tener claras mis prioridades; claramente en esas prioridades no se incluían los chicos. Era raro que algún chico llamara mi atención, pero era lógico que siendo adolescente me fijara en muchachos, aunque cierto era que ellos no se fijabanen mí, no es porque fuera fea o poco atractiva, simplemente se sentían intimidados, o eso era lo que la psicóloga escolar me decía; también me decía que tenía que convivir mas con todos mis compañeros, pero al parecer ellos me intimidaban a mí. Estaba bastante encariñada con ella, tanto como ella conmigo, más que una psicóloga escolar que estaba obligada a escucharme, se había convertido en unaamiga a la que realmente le importaba lo que me pasaba, así que al haber terminado mi último año en la secundaria tuve que decirle adiós, ella me dijo que podría volver cuando quisiera, pero yo sabía que no sería como antes.
Me dio muchos buenos consejos durante las últimas semanas de clases, consejos que según ella me ayudaría mucho en el primer año de preparatoria, uno de ellos fue que debíaconsultar al consejero; supuse que ella pensaba que yo aun necesitaba ayuda, y si, la necesitaba, cada vez que pensaba que en poco tiempo estaría frente a nuevas personas, nuevos maestros y en un lugar completamente diferente la piel se me ponía chinita; pasaba horas practicando como hablar con mis futuros nuevos compañeros, imaginaba como serian y como se comportarían conmigo,¡Vaya! tengo unaimaginación muy grande, o un autoestima muy bajo…
En la ceremonia de graduación me toco dar el discurso a mi generación, claro por buenas notas, tenía miedo… ¿Y si me abucheaban?, ¿O se reían de mí?, no creo que la mitad de esos chicos que se graduaban supieran mi nombre, o al menos quien era yo. Yo si sabía quien eran ellos, los más populares, a los que todos conocen, los más simpáticos y atractivoschicos, que hasta los profesores los reconocían; yo siempre pensaba que su vida era perfecta, llena de amigos y siendo queridos por todos. Yo pienso que todos pensábamos eso, hasta que aquel chico de ultimo grado, capital del equipo de futbol, el que tenia a la capitana de porristas como novia y unos padres ricos que lo consentían en todo, ese chico que parecía ser algo prometedor, sesuicido…Nunca supimos porque, siempre que se le veía parecía bastante contento; había rumores de que lo asesinaron, pero nunca se comprobó; desde ese dia la escuela se torno diferente para mi, deje de ver a los chicos populares como perfectos, y me di cuenta de que puedes ser querido por todos pero a la vez querido por nadie.
Me levante temprano para ir a la escuela, era mi primer día en la preparatoria y...