Discurso de Rómulo Betancourt en la Asamblea Constituyente de 1947

1947

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Los trabajos de la Asamblea Nacional Constituyente, abiertos en diciembre de
1946 y extendidos hasta el siguiente mes de octubre, hicieron de centro de la atención
política a lo largo de gran parte de 1947. Los debates celebrados en su seno con motivo de la elaboración de la nueva Constitución Nacional llegaron a conmover al país
en su integridad, retransmitidos como eran porradio, y suministraron escenario para
que destacaran en tanto que parlamentarios Andrés Eloy Blanco y Domingo Alberto
Rangel, por A.D., y Rafael Caldera y Edecio la Riva Araujo, por C.O.P.E.I.
Por otra parte, es digna de nota la aparición de la Confederación de Trabajadores
de Venezuela, en noviembre, en un ambiente de expansión del sindicalismo obrero
estimulado por el propio Gobiernopresidido por Betancourt, quien veía en la organización al más alto nivel de patronos y obreros un signo de los distintos tiempos políticos advenidos como resultado del triunfo del bando democrático en la II Guerra
Mundial.
Por último, el 14 de diciembre tuvieron lugar las elecciones presidenciales que dan
el triunfo al candidato de A.D., Rómulo Gallegos, con lo que se consumaba un nuevo hitonacional en la marcha hacia la conformación de un sistema político de condición civil y democrática

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ALOCUCIÓN DIRIGIDA POR
DEL AÑO NUEVO DE 1947

BETANCOURT

A LA

NACIÓN,

CON MOTIVO

Conciudadanos:
Por segunda vez me cabe el honor y la responsabilidad de dirigirme a los venezolanos, amigos u opositores del Gobierno, con motivo de las tradicionales festividades
deAño Nuevo.
1946 pasará a la historia de la Nación signado de singular relieve. Es un año inicial de la era auténticamente democrática de la República. En un día de octubre de este
año se cumplió cabalmente lo que había sido declaración escrita e insincera en las sucesivas Constituciones por las cuales se rigió, teóricamente, la vida institucional de
Venezuela. La residencia de la soberanía en elpueblo dejó de ser hipócrita formulación
principista para transformarse en realidad viva y operante. El 27 de octubre, un millón
y medio de venezolanos, escogieron en elecciones ejemplares la Asamblea Nacional
Constituyente. La casi totalidad de la población de ambos sexos, apta para el ejercicio
del sufragio, concurrió en aquel día memorable a depositar sus votos en las urnas y a
decir, enforma irrefutable, que ya será imposible en Venezuela el ascenso al Poder o a
la representación parlamentaria por vías de la asonada o de la imposición ejecutiva.
Circunstancias imperativas determinaron que Ejército y Pueblo substituyeran violentamente, el 18 de octubre de 1945, a un régimen que era vergüenza y oprobio para la
República. Tranquilos de conciencia estamos con respecto al fallo dela Historia frente a esa acción insurgente. Pero no hemos negado nunca que las vías de la asonada no
son las que deba trajinar una Nación civilizada para substituir por otros a los equipos
humanos que la gobiernan. Por eso, nuestro más decidido empeño lo pusimos en que
se cumpliera lo más rápidamente posible el hondo anhelo soterrado en la conciencia
colectiva de ejercitar el derecho de elegira sus mandatarios en libres comicios.
Las elecciones para representantes a la Asamblea Nacional Constituyente significaron algo más fundamental aún que la validación jurídica y la justificación histórica
de la Revolución de Octubre. Fueron un mentís a la supuesta incapacidad del pueblo
para el total ejercicio de la vida democrática. Desde el culto letrado hasta el ignaro
analfabeto,peyorativamente acusado de apenas conocer la “o” por lo redonda, concurrieron masivamente a las urnas, transidos de una unción filiable en las místicas religiosas. Ni un solo hecho de sangre, ni un solo desorden, se registró en ese día en el vasto
ámbito venezolano; y la presencia austera de las Fuerzas Armadas Nacionales en casi
todos los sitios donde se congregaron votantes, puso rúbrica de...