Discurso_Emilio_Ybarra

DISCURSO DE EMILIO YBARRA
EN EL CIRCULO ECUESTRE


En primer lugar quiero manifestar mi más profundo agradecimiento por la distinción de la que he sido objeto. No voy a caer en el tópico de afirmar que no soy digno de esta recompensa, porque esto siempre me ha parecido una desconsideración hacia el Jurado y un poco de falsa modestia.

Ante todo quiero que conste mi agradecimiento a todos losasistentes que me acompañáis en este acto, tanto socios del Círculo como amigos de Barcelona, y quisiera hacer una referencia muy especial a los tres Presidentes del Círculo, con los que he tenido más relación. A Carlos Güell, amigo de toda la vida, de él y de su familia, que fue con quien iniciamos los contactos para estudiar la posibilidad de un rejuvenecimiento tanto de la actividad como de lafinanciación de este Club, operación que felizmente ha resultado un verdadero éxito. A Manolo Carreras, siguiente Presidente, que ha seguido impulsando con fuerza esta casa y que hoy ha querido participar de forma activa en el acto haciéndome este ofrecimiento. Y por último, a Borja García Nieto, actual Presidente, lleno de impulso y entusiasmo, quien ha organizado este acto. Creo que a estaInstitución le esperan nuevas etapas de brillantez y de liderazgo social bajo el mandato de la emprendedora Junta que preside.

Muy especialmente quiero dar las más sentidas gracias a todos y cada uno de los miembros del Jurado de este Premio, que son, en definitiva, los responsables directos de que hoy esté aquí recibiendo un galardón por el que siempre guardaré el mejor recuerdo.

A mis años y despuésde haber dirigido un gran banco español, uno de los mas importantes del mundo, fruto de la primera gran fusión bancaria que se efectuó en España, me van a permitir que me sienta vanidosamente premiado y sobre todo agradecido a quienes con esta distinción me arrancan de ese segundo plano de una situación profesional menos activa.

Una etapa vital, en la que los recuerdos se entrelazan con nuevosafanes mas personales, donde se vive un espacio de paz interior, una etapa donde la experiencia vivida nos hace ser a la vez pesimistas y esperanzados, mas libres y a la vez mas temerosos.

Precisamente desde esta larga experiencia acumulada, me vais a permitir que al recibir este galardón, reflexione brevemente sobre el papel que los valores cívicos deben jugar en este momento de incertidumbre ydesconfianza.

Vivimos, queridos amigos del Círculo Ecuestre, en un tiempo que se nos antoja singular, pero miremos al pasado. Al colectivo y a nuestra propia experiencia vital.

La historia de una Institución, como la que nos acoge, nos informa de que la crisis que estamos viviendo ha tenido precedentes, y la historia de los ciclos económicos registra gestiones acertadas que han superado losmomentos en los que, durante mucho tiempo, no se veía la luz al final del túnel.

Las situaciones han sido distintas, pero en las respuestas que se han arbitrado, hay un hilo conductor indudable, que no es otro que el de una Sociedad que no se entrega, que no se resigna, que confía en sus fuerzas y no en las ajenas. Una Sociedad que cree, con obras, en la libertad económica, en el mercado como fuerzareguladora de la economía, que valora el riesgo empresarial, la capacidad de emprendimiento, el trabajo bien hecho, la austeridad y el respeto a la Ley.

En la actual coyuntura la Sociedad está perpleja y paralizada. Vivíamos en la confianza ciega, en el final histórico de los ciclos. El fenómeno del Low Cost , así como las hipotecas baratas, el endeudamiento fácil, hacía pensar a la Sociedad, noshacía pensar a todos, seamos sinceros, que el camino del progreso era inevitable.

La crisis exige medidas económicas globales, repensar un nuevo capitalismo, quizá mas “servidor” que “dominador”, nuevas Instituciones, pero lo que sobre todo exige es una nueva Sociedad, que recupere los viejos valores de una comunidad dinámica, la capacidad de riesgo, de innovación, de sacrificio, de imaginación....