El Buscón

EL BARROCO ES UNA CORRIENTE LITERARIA EMPLEADA POR QUEVEDO PARA HACER REIR POR LO FUGAZ Y COMPLEJO DE LA VIDA, PERO SOBRETODO POR LA RESIGNACIÓN DEL SER HUMANO A TAL SITUACIÓN

“por el consiguiente, la hambre, pues parecíaque tenía por pecado matarla, y aun el herirla, según regateaba el comer.”[1]

La novela picaresca de Francisco Quevedo, “El Buscón” trae consigo el reflejo del pesimismo, la falta de conciencia ante los hechos que se enfrentan, el actuar de manera que va en contra de losprincipios morales y que lleva al ser humano a robar, mendigar, vagabundear y andar por el mundo como si nada hubiera por hacer en el y por el. En la picaresca del siglo XVII se muestra a un hombre que pierde la cabeza y se lanza por el camino del engaño y lo mundano. Esta obra es el mundo de fantasía y negación de la realidad presente, la ridiculización del hombre que sigue su camino con la cabezagacha tan solo esperando por los residuos que le tocaron de la sociedad en la que vive. En últimas, la picaresca surgida en el periodo del Barroco, es el hundimiento de la literatura Realista y el surgimiento del conceptismo que tiene como base la ingeniosa asociación de palabras e ideas. Dicho en otras palabras, esta corriente barroca generalmente “se caracteriza por la concisión de la expresióny la intensidad semántica de las palabras, que se cargan de significados, adoptando varios sentidos. De este modo se crea frecuentemente el lenguaje polisémico. El conceptismo opera con los significados de las palabras y con las relaciones ingeniosas entre ellas.”[2] Dentro de ella, los recursos más usuales son la elipsis, antítesis, equívoco, paradoja o la paronomasia. Para brindar mayorclaridad de lo mencionado, a continuación se tratará sobre el desengaño reflejado en la novela.

En primer lugar, es destacable el que Quevedo haya reunido la realidad de la pobreza de los hombres de clase baja y su afán por entregarse a lo mundano y perdido de las acciones para escapar de su propia realidad. Es notable la clase de humor que el autor desarrolla en su obra. Este es macabro y plagado depremoniciones especialmente de muerte “No me detendré en decir la penitencia que hacía. Tenía su aposento – donde solo ella entraba y algunas veces yo, que, como era chico, podía- todo rodeado de calaveras que ella decía eran para memorias de la muerte, y otros, por vituperarla, que para voluntades de la vida. Su cama estaba armadas sobre sogas de ahorcado”[3] como dando a entender que es lo únicoque puede esperar el hombre. Ya sea de manera cómica combinada con las aventuras fantásticas que vive su protagonista, no deja de ser una muestra del ilusionismo que acompaña la vida del ser humano del siglo XVII que se cubre con máscaras y prendas ajenas para mostrar lo que no es, más bien lo que querría ser pero que jamás logrará. De ahí que francisco Quevedo muestre personas que quieranpresumir de hidalgos cuando en verdad están cubiertos de harapos.

El conjunto de engaños encontrados en la obra, deja clara la diferencia entre ilusión y realidad. Es por ello que el autor recurre a diminutivos que nada de bello llevan consigo, por el contrario es el medio empleado por el para mostrar lo irónico e hipócrita del momento. Igualmente se da muestras del desengaño del hombre quien conmentiras busca obtener algo que quiere o mostrar lo que no es. Tal es el caso de aquel caballero trabajador que sin tener criada alguna quiere pretender que existe. En este sentido, la habilidad de francisco Quevedo es poner en boca de los personajes comentarios que suenan bastante naturales o propios de hechos cotidianos y familiares al hombre como para ser notados como mentira. “Es el periodo de...