El Código General Del Proceso. Fabian Lopez Guzman

EL CÓDIGO GENERAL DEL PROCESO Y LAS SOCIEDADES POR ACCIONES SIMPLIFICADAS SAS

FABIÁN LÓPEZ GUZMÁN

El proyecto de Código General del Proceso liderado por el Instituto Colombiano de Derecho Procesal está muy bien estructurado y se erige en una ley de avanzada en el panorama latinoamericano. Son muchas las ventajas y bondades del sistema propuesto para el desarrollo de la actividad judicial enel país, amén del valioso grupo de expertos nacionales e internacionales que han venido trabajando durante décadas en la elaboración de este ordenamiento.

Hay un punto que amerita nuestra atención y que vale la pena poner a consideración de la doctrina nacional y, por supuesto, del legislador, y es el relativo a la derogatoria del artículo 40 de la ley 1258 de 2008. Como es sabido, estanorma regula las sociedades por acciones simplificadas SAS en Colombia. Ha sido tan arrollador el éxito de esta nueva figura societaria en nuestro medio, que hoy existen más de 100.000 compañías organizadas bajo este tipo societario; sus ventajas estructurales y funcionales son innegables e indiscutibles, en particular en lo tocante al sistema previsto para la solución de controversias internas, yaque en el artículo 40 de la ley se dispuso que los conflictos societarios, incluso los que surjan entre socios y administradores, podrán ser solucionados ante la Superintendencia de Sociedades mediante el trámite del proceso verbal sumario, o mediante arbitraje comercial o amigable composición. Este artículo constituye una conquista procesal en el ámbito latinoamericano en la medida en que losconflictos societarios se radican en cabeza de entidades ajenas a la jurisdicción ordinaria, como, por ejemplo la Superintendencia de Sociedades, verdaderos especialistas en el tema societario y empresarial o, en su defecto, se deja en manos de árbitros expertos en el escenario de un tribunal de arbitramento.

Con visión pragmática y atendiendo a la filosofía de descongestión judicial promovida enlas últimas décadas por el mismo legislador, así como por el prestigioso Instituto Colombiano de Derecho Procesal, se promovieron reformas judiciales con objeto de apoyar la labor judicial mediante la atribución de competencias jurisdiccionales a otras entidades, como, por ejemplo, a las Superintendencias. Así, por ejemplo, la ley 446 de 1998 le confirió facultades jurisdiccionales a laSuperintendencia de Sociedades, en armonía con lo dispuesto en la ley 222 de 1995. Luego, con el advenimiento de la ley 1258 de 2008 sobre SAS, se desjudicializaron definitivamente los conflictos societarios, en virtud de lo estatuido en el artículo 40; ahora los conflictos empresariales no tenían que ser llevados a la justicia ordinaria, por lo regular criticada por los empresarios por lenta, ineficaz y noespecializada en conflictos empresariales. Para nadie es un secreto que un conflicto societario en la jurisdicción ordinaria puede tardar décadas en resolverse y conducir a una compañía a la insolvencia empresarial. Por ello, el artículo 40 de la ley 1258 de 2008 se erigió en un valioso y estratégico mecanismo alternativo de resolver conflictos societarios; los empresarios colombianos no sólo hanelegido el modelo societario SAS por la flexibilidad de su régimen y por la eliminación de rituales y formalismos decimonónicos, sino también por el método de solución de conflictos previsto en la disposición comentada. El hecho de no tener que asistir a los juzgados para resolver los pleitos societarios y empresariales fue recibido con beneplácito por el sector empresarial e industrial nacional,e incluso por los inversionistas extranjeros.

Sin embargo, la alegría duró poco, ya que la ley 1395 de 2010 estableció en su artículo 22 que todos los procesos que se ventilan ante las Superintendencias tendrán segunda instancia. De allí se colige sin dubitación que los conflictos societarios de las SAS, cuya competencia reside en la Superintendencia de Sociedades, tendrán segunda instancia...