el delfin

Los primeros rayos del sol matutino se filtraron suavemente en media de un mar profundo y azul.
Un joven delfín surgió de las profundidades del mar. Atravesó la oladibujando unaleve estela sobre el muro de agua. De pronto el agua lo envolvió poco a poco hasta ahogarlo en la cavidad de la ola; el lugar soñado de todos los surfistas. El Delfín se llamabaDanielAlejandro. Él y las olas eran inseparables. Daniel llego a perder la noción del tiempo, en su vida.
Deslizarse por las olas era su gran pasión, comprendió que el océano es algo vivopletórico de sabiduríay belleza. Su afición por las olas le acarreó problemas con sus compañeros. Todos su compañeros se dedicaban a trabajar y Daniel a sus ejercicios.
Un día sumejor amigo, Miguel Benjamín le pregunto¿Por qué arriesgas tu vida en el arrecife? Muchos estamos convencidos de que un día te matarás en el arrecife. ¿Por qué no te dedicas a pescaren lugar de perder tiempo?
Daniel le contestó: Migueldebes buscar tiempo para soñar. No dejes que tus temores te impidan hacerlo.
Algún día, Daniel, madurarás y veras las cosascomo las vemos nosotros.
Daniel tomo la decisión de limitarse a perfeccionarsu técnica. Así que sólo se ocupara de sus asuntos sin molestar a nadie. De pronto Daniel escucho la voz delmar que le decía: Has conseguido algo que otros delfines ni siquiera imaginan. Confía en tuintuición, sigue los dictados de la vida que has elegido.
Siempre que Daniel regresabajunto a sus compañeros, ellos se burlaban de él como de costumbre.
Daniel había comenzado a practicar en laparte exterior del arrecife, una regio de atolón a la que ningún delfín sehabía aventurado jamás a salir.
Cierta noche Daniel decidió abandonar el grupo. Aquella noche tuvo que luchar, además decontra las olas y la corriente, contra sus dudas.