el nuevo amacecer
Catedrático: Gálvez Rios
ANÁLISIS DE LECTURA Nº 1:
Michael Howard, nacido el 7 de julio de 1941, es un político británico líder del Partido Conservador. Nació en Gorseinon, Gales. Su padre era un inmigrante judío de Rumania que llegó al Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial para escapar de la amenaza del fascismo. El apellido de la familia era "Hecht", pero lo cambiaron a"Howard". Estudió a Peterhouse College, Universidad de Cambridge.
Fue ministro del interior. Otro de los temas en el que Howard ha insistido es la inmigración, al sugerir establecer medidas de control. Paradójicamente, sus padres fueron inmigrantes provenientes de Rumania.
EL AMANECER DEL SIGLO
Fuente: Howard, Michael (1999). El amanecer del siglo. En: Varios autores, Historia Oxford del sigloXX. Barcelona: Planeta. p.27- 36.
“Los pueblos de Europa occidental y de Norteamérica parecían tener sobrados motivos para saludar el siglo XX como la aurora de una nueva y más feliz era en la historia de la humanidad. La ciencia y la tecnología estaban mejorando ya su nivel de vida más allá de lo imaginable y dominaban el mundo con su comercio, sus finanzas y su poderío militar. La mayor partedel hemisferio occidental, el continente africano, el subcontinente indio y gran parte de Asia, fuera de China, habían sido colonizados directamente por los europeos o penetrados profundamente por la cultura europea, y parecía evidente que las sociedades que todavía conservaban su independencia sólo podrían seguir haciéndolo en el futuro si, como la japonesa, imitaban con éxito el modelo europeo.Este modelo fue conocido, luego, como «capitalismo liberal». Quienes se beneficiaban de sus ventajas materiales tenían conciencia, primordialmente, de su estructura política: libertad de expresión, libertad de intercambio comercial, libertad de investigación científica, movilidad de la mano de obra y autogobierno democrático como un derecho siempre creciente. Pero en esta ideología liberalsubyacía un proceso económico que Karl Marx identificó acertadamente ya medio siglo antes como el más revolucionario que hubiese visto jamás el mundo. Fundamental en este proceso era la acumulación de recursos y su inversión en la industria y en las comunicaciones. Esta inversión había hecho posible el desarrollo de la mecanización, primero con la utilización de la fuerza de vapor y luego cada vezmás con la de la electricidad, a una escala que había transformado la sociedad de Europa occidental y que haría lo mismo, durante el nuevo siglo, con la del resto del mundo.
Esta transformación consistía en la transición de comunidades con base agrícola -gobernadas jerárquicamente y en gran medida autosuficientes, cuya estructura social estaba legitimada por una tradición de un milenio y habíasido reforzada por las autoridades eclesiásticas que ofrecían una sanción supranatural-, en sociedades urbanas o urbanizadas muy móviles, entrelazadas globalmente, en las cuales la autoridad política estaba legitimada por, cuando menos, la apariencia del consenso popular y cuya vida pública iba secularizándose cada vez más. Entretanto, las creencias religiosas, que hasta entonces habían sidosocialmente preceptivas, se convertían en marginales (allí donde lograban sobrevivir) como cuestiones esencialmente privadas. Este proceso, conocido en general como «modernización», parecía, para bien o para mal, ineluctable, pero conforme avanzaba el siglo iba a provocar a través del mundo frecuentes y a veces feroces sacudidas, tanto religiosas como seculares.
En 1900 las fuerzas de laciencia, la razón y el progreso que se relacionaban con la Ilustración del siglo XVIII parecían haber ganado el combate en Europa. La llegada del ferrocarril y del buque de vapor había destruido la autosuficiencia de las viejas comunidades agrarias. Al relacionarlas con una economía de dimensión continental no sólo obligaron a los campesinos a modernizar sus tradicionales modos de producción, sino que...
Regístrate para leer el documento completo.