El Presidente Uruguayo Y Las Obras Que Le Dejó Copi En Su Despacho

El presidente uruguayo y las obras que le dejó Copi en su despacho (otra curaduría de obras argentinas para un personaje de ficción)


“Le estaré, pues, muy agradecido si saca del bolsillo su estilográfica y tacha, a medida que vaya leyendo, todo lo que voy a escribir. Gracias a este simple artificio, al término de la lectura le quedará en la memoria tan poco de este libro como amí, puesto que, como probablemente ya habrá sospechado, prácticamente ya no tengo memoria”
Fragmento de “L’Uruguayen” de Raúl Damonte



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Querido Amor que no fue:

Sin duda le sorprenderárecibir noticias mías desde esta ciudad tan lejana llamada Montevideo. La razón por la que me encuentro escribiéndole, confesémoslo de entrada, no se me escapa: lo extraño. Sí, terriblemente y desde hace rato, desde ese mismísimo momento en que desperté y mi cabeza ya no estaba sobre su regazo y me hallé solo entre escritos tachados, colillas de Gauloises y obras contemporáneas procedentes del paísque me vio vestir ese traje de bailarina española que a Mister Puppy tanto excitaba y ganancia monetaria le daba. Aún no tengo claro si su rijoso goce era causado por mi fibrosa y esbelta figura travestida (en la intimidad me llamaba “mi Príapo uruguayo”) o por su pervertido e inagotable voyeurismo. Podía pasarse horas filmando las gotas de sudor que esos disolutos antropos asperjaban sobre lassábanas, las almohadas, la alfombra colorada, sobre cada milímetro de esa fétida cama, sobre mi vejada alma desahuciada. Los planos secuencia, desgraciadamente, le encantaban, sus tomas al tiempo conculcaban, soñaba con ser Kosúrov o alguno de los daneses del Dogma 95, estaba obsesionado con hacer una película homoerótica en 35mm y no aparecer en los créditos. Ese falso Papa, traficante de blancas,llegó a hacerme pasar todo un día (1440 minutos enteros) boca abajo sobre una tabla de madera terciada mientras una cola de cuerpos velludos me sodomizaba con fruición y aguda vehemencia desquiciada. "There is no better way to know death than to link it with some licentious image", repetía tantricamente en mi cabeza intentando anular los lacerantes arrítmicos movimientos que sacudían eso que, hastahacía no mucho tiempo, había sido mi templo. ¿Bataille o Sade fue quien escribió ese conjunto de palabras que tanta contención me dieron durante esos 70 meses funestos? No sé, no lo recuerdo, puede que la haya leído en algún graffiti callejero u oído en algún vernissage de viejos artistas modernos o en alguna visita oficial al extranjero o en alguno de los cien barrios porteños... igual, importaun bledo, entre ColorIURIS y el copyleft le están organizando el velorio al concepto de autor en el mismo lugar donde fue velada la industria de la música y la cultura CD. Me gustaría tanto entrar de su brazo a ese entierro... Ya perdí la cuenta de cuánto hace que no tengo la dicha de olerlo, mirarlo, escucharlo, sentirlo... (De otro. Será de otro. Como nunca de mis besos. Su voz, su cuerpo claro.Sus grandes ojos fijos. Porque en noches como ésta me tuvo entre sus brazos, mi alma no se contenta con haberle permitido seguir su parisino destino). Usted sabe que lo quiero más que a mi mismo, más que a mi patria, más que a mi lengua, más que a la Oreiro, más que a nada en el mundo entero; yo sé que es conciente de cuán inmenso es el amor que despertó en mí desde el mismísimo momento en quedesnudos al mar nos metimos. Talentoso letrado mío, Copi querido, se me hace tan difícil la tarea de vivir si no está conmigo, cada uno de mis suspiros se los dedico, cada poro de mi piel grita su nombre, cada átomo que me compone ruega que cruce esa puerta y me salve de este doloroso deseo de ser suyo, de este desgarrador dolor con el que vivo por no ser por usted correspondido. ¿Recuerda la...