Etnocentrismo

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E ETNOCENTRISMO

Ever arrlo P. GIMARÁES ROCHA
Editora Brasiliense,

Saó Paulo,

Cap. 1 "Pensando
Traducción:

198:3. 2c!a edición
en Partir"

Liliana Seré)

Etnocentrisrno
es una visión del mundo en III cual nuestro propio grupo
es tomado como cen tro de todo, ytodos los otros son pensados
y
sentidos
a través de nuestros
valores,
nuestros
modelos,
uu c s t r as
definiciones de lo que es la existencia. En el plano intelectual,
puede ser
visto como la difícultad
de pensar la diferencia;
en el plano afecti\(),
como sentimientos
de extr añez a, miedo, hostilidad, etc.
Preguntar qué es el etnocentrismo
es, pues, indagar sobre un Ienuuu.nodonde se mezclan
tanto elementos
intelectuales
y racionales
COlIl!,)
elementos
emocionales
y af ectivos. En el etnocentrismo,
estos dos
planos del espíritu
humano -sentimiento
y pensamientovan juntos,
componiendo
un fenómeno no sólo fuertemente
arraigado en la historia
de las sociedades
sino también fácilmente
hallable en el día-a-día de
nuestras vidas.
Así, la cuestión central deletnocentrismo
puede ser expresada
como el
intento de conocer los mecanismos,
las formas, los caminos y raz oncs
-Iinalmentepor los cuales tantas y tan profundas
distorsiones
se
perpetúan
en las emociones, pensamientos,
imágenes y representaciones
que realizamos
de la vida de aquellos que son diferentes
a nosotros.
Este problema no es exclusivo de una determinada
época ni de una(mica
sociedad. Tal vez el etnocentrismo
sea, entre los hechos humanos, uno
de aquellos de mayor unanimidad.
Como una especie
de paño de fondo de la cuestión
e tno c cn nica.
tenemos la experiencia de un choque cultural. De un lado, conocemos un
grupo del "yo", "nuestro" grupo, que come igual, viste igual, gusta de
cosas parecidas,
conoce problemas
del mismo tipo, cree en los mismosdioses, se casa igual, vive con igual estilo, distribuye
el poder de la
misma forma, otorga a la vida significados
en común y procede.
el]
muchas cosas, de manera semejante.
Allí, entonces,
de repente.
nos
enfrentamos
a "otro", el grupo del "diferente" que, a la vez, ni siquiera
hace las cosas como nosotros, o cuando las hace es de forma tal que
no las reconocemos
como posibles.
Y, másgrave aún, este "OITU"
también sobrevive a su manera, disfruta de su sobr evivcncia, tambicn
está en el mundo y, aunque diferente, también existe.
Este choque
generador
de etnocentrismo
nace,
quizás,
en la
constatación
de las diferencias.
A grosso modo, un 111S(!t>
un punto
de vista del grupo
del "yo", los que están
fuera
p u e d.:n svr bravos
y traicioneros
tanto
como
mansosy bondadosos
.
.\ciL'I1lÚS, "bravos"
)' "mansos"
son dos términos
que muchas
veces
fu er on empleados
en Brasil para designar
el "humor"
de de terrnmados
arumalcs
y C'l "estado"
de diversas
tribus de indios o de esclavos
negros.
l.a figura dvl Ioco, por ejemplo,
en nuestra
sociedad,
es marupuladapor
una sl'rk de representaciones
que oscilan
entre estos
dos polos,
siendocknigr,lda
() exhaltada
-como el marcianoa gusto de las intenciones
que
se r o ng an. Esto no sólo a lo largo
de la historia,
sino también
en
clif'erentl's
contextos
en el presente.
La expresión
"fulano
es muy loco",
pue dc ser elogiosa
en ciertos
casos y peyorativa
en otros.
En algunos
momentos
de la historia,
el loco fue perseguido
y torturado,
en otros,
fue hechoportador
de una palabra
sagrada
y respetada.
,,\qucllos
que son diferentes
del grupo
del "yo" -Io s diversos
"otros"
de
est!' IlHlIIClo- por no p o d cr; decir algo de sí mismos,
acaban
siendo
representados
por
la óptica
etnocéntrica
y según
las dinámicas
idcológicas
de determinados
momentos.
'
En nuestra
llamada
"civilización
occidental",
en las sociedades
complejas
e...