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Páginas: 2 (294 palabras)
Publicado: 11 de septiembre de 2013
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NARRACIONES PUERTORRIQUEÑAS
Si en la ciencia no se puede hablar de verdad absoluta, menos en literatura. La realidad de la narrativa, por más objetiva que pretenda ser,siempre se manifiesta al lector distorsionada. Con todo y eso, la narrativa es la que mejor dibuja la realidad humana de una sociedad como un todo. Tal vez los valores propios delnarrador, valores ya no tan propios si él es parte integrante de la misma sociedad, influyan en la temática, pero no necesariamente en la exposición de los mismos
Disciplina yautocontrol
Uno de los problemas más enervantes en nuestra descomposición social es la falta de disciplina, de obediencia y de autocontrol. El desorden y falta de rigor en laobservancia de las normas establecidas son rampantes y los hemos elevado al rango de idiosincrasia caribeña y tropical.
Culturalmente somos una nación anárquica, sin madurez, impulsivaque reacciona circunstancialmente, sin referencia a un marco sociológico e histórico, sin mesura ni ponderación. De ahí nuestra superficialidad, la irrespetuosidad en el debatepúblico, los odios y las hondas divisiones y la falta de juicio prudente en nuestro quehacer cotidiano.
J. R. Lebrón Velázquez. "Los valores de la disciplina". El nuevo día, 9 oct. 1989La gran tentación
El traslado del problema de identidad y autenticidad político-social al nivel ético convierte la actividad política en quehacer ético. Hay indicios defundamentar los valores morales en la identidad supuestamente no lograda del ser puertorriqueño. ¿Qué se podría esperar de una moralidad apoyada en una especie de ontología inconclusa, enla no-seidad del "ser" puertorriqueño? Las categorías del caos, desorden y juego carnavalesco resaltan en aquellas sociedades que van hacia el no ser o sobreviven a lo impropio.
NARRACIONES PUERTORRIQUEÑAS
Si en la ciencia no se puede hablar de verdad absoluta, menos en literatura. La realidad de la narrativa, por más objetiva que pretenda ser,siempre se manifiesta al lector distorsionada. Con todo y eso, la narrativa es la que mejor dibuja la realidad humana de una sociedad como un todo. Tal vez los valores propios delnarrador, valores ya no tan propios si él es parte integrante de la misma sociedad, influyan en la temática, pero no necesariamente en la exposición de los mismos
Disciplina yautocontrol
Uno de los problemas más enervantes en nuestra descomposición social es la falta de disciplina, de obediencia y de autocontrol. El desorden y falta de rigor en laobservancia de las normas establecidas son rampantes y los hemos elevado al rango de idiosincrasia caribeña y tropical.
Culturalmente somos una nación anárquica, sin madurez, impulsivaque reacciona circunstancialmente, sin referencia a un marco sociológico e histórico, sin mesura ni ponderación. De ahí nuestra superficialidad, la irrespetuosidad en el debatepúblico, los odios y las hondas divisiones y la falta de juicio prudente en nuestro quehacer cotidiano.
J. R. Lebrón Velázquez. "Los valores de la disciplina". El nuevo día, 9 oct. 1989La gran tentación
El traslado del problema de identidad y autenticidad político-social al nivel ético convierte la actividad política en quehacer ético. Hay indicios defundamentar los valores morales en la identidad supuestamente no lograda del ser puertorriqueño. ¿Qué se podría esperar de una moralidad apoyada en una especie de ontología inconclusa, enla no-seidad del "ser" puertorriqueño? Las categorías del caos, desorden y juego carnavalesco resaltan en aquellas sociedades que van hacia el no ser o sobreviven a lo impropio.
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