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La vida, ¿Un don? ¿Una obligación? ¿Un compromiso? ¿Mera casualidad?... bueno, en fin. Pero lo que sí sabemos es que es una realidad. Estamos vivos, sentimos, experimentamos, conocemos, buscamos,podemos ver, percibir, escuchar, nos relacionamos y “construimos” nuestra vida. Convivimos en un mundo donde todos tenemos las mismas condiciones, en cuanto que somos iguales y nuestro ciclo es elmismo. Todos somos seres humanos con una misma naturaleza, en este sentido no hay diferencia. Aquí no entra nada que sea externo nuestro, ni clases sociales ni puestos o cargos de gran rango ni la fama nila jerarquía ni la cantidad de dinero que pueda tener, si creo o no creo, solo cuenta nuestra condición humana. Tenemos ser por el hecho de estar vivos y por ello también existimos en una realidadconcreta y puntual, donde debemos desenvolvernos enfrentándonos a un sin número de situaciones, acontecimientos y circunstancias que hacen parte de la vida, independientemente de si son buenas o malas.Un don relativamente maravilloso. Es una de las descripciones que se le podemos dar a la vida, porque no todos la concebimos de la misma manera ni para todos es lo mismo. La vida, maravillosa, siporque hace que el ser humano sea hombre, permite que el hombre sueñe, tenga aspiraciones, deseos, metas y ésta misma es una motivación para su superación. En ella hay oportunidad, esperanza eilusiones, y esto nos garantiza que hay porque continuar y porque luchar. Pero hablando de la parte relativa de la vida, a pesar de todo lo que ésta permite, es un misterio. Esta realidad que llamamos don, esimpredecible, pues así como llega se va, y nadie se percata del momento ni de la hora. Por ello podemos decir que nos resta seguridad. Pues en el momento que más segura se encuentra una persona, conun futuro planeado y muchos sueños por cumplir, ahí, en ese preciso momento la vida juega con ella o simplemente la abandona. He ahí su misterio. Nadie la tiene asegurada. Además, nos logra...