La Concepción Del Hombre En El Teatro Isabelino

LA CONCEPCIÓN ISABELINA DEL HOMBRE

Si en el teatro griego el hombre aparece como esclavo de los deseos y pulsiones divinas, en la dramaturgia del teatro isabelino la noción de libre albedrío cristiana resulta fundamental para crear las condiciones trágicas del ser humano. En el teatro de Shakespeare y Marlowe el hombre es responsable de sus acciones, puede elegir entre el bien y el mal,respetar las leyes morales o infrangirlas movido por sus pulsiones. Las decisiones son humanas, no dependen de dioses o coincidencias fortuitas. Siempre hay algun momento en el cual el anti-héroe duda antes cometer algun delito y si bien su pulsión criminal parece irrefrenable, siempre tiene elección. Fausto es perfectamente conciente en el momento en que firma el pacto de sangre con Mefistofeles cualserá su destino. Pero la tentación del poder que le confiere ese pacto resulta más fuerte y Fausto se condemna al infierno con sus proprias manos. Así Macbeth, que tentado por la posesión de la corona vacila antes el asesinato porque sabe que nada será lo mismo después de esa acción. Ni hablar de Hamlet, tragedia construida sobre el “que hacer” humano: una parte de Hamlet pide a gritos algo lo quela otra parte aborrece profundamente: la ejecución de un asesinato. Por más que eso sea justificado por la necesidad de hacer justicia, Hamlet queda paralizado antes la duda.

El tema del libre arbedrío nos introduce hacia una concepción del hombre más completa con respecto al pasado: el hombre es inevitablemente marcado por la contraddicíon, por la dualidad. Esta visión moderna acerca de lohumano, es según Harold Bloom, la invención de Shakespeare. La convivencia del bien y del mal, de una caracteristica y su opuesto, adentro del individuo. La coexistencia de matíces.

Una de las contraddiciones del ser humano que más ha sido explotada por el tatro isabelino es la que existe entre las pulsiones humanas, perversas y destructoras, y el orden moral del mundo, tema central en obras comoRicardo III o Macbeth. Pero también hay una profunda conciencia de que lo valores humanos más altos no son conciliables con un mundo en el cual el poder y la sociedad tienden a aplastar la libertad del individuo y lo ponen frente a decisiones intolerables. Dice Kott en “Los reyes”: “En Shakespeare todos los valores humanos son quebradizos y el mundo es más fuerte que el hombre”. Hace particularreferencia al personaje de Lady Ana en la escena segunda del primer acto de Ricardo III, donde hay una progresiva debilitación de la voluntad de Ana de quedar firme frente a los avances del verdugo: la mujer pasa de las invetivas más odiosas a dejarse arrastrar a la cama po él en tan sólo una escena. Ejemplar es tambén el caso de Romeo y Julieta, cuyo amor absolutista se estalla contra laposibilidad de existir libremente en una sociedad como la de Verona, polarizada entre dos bandos sobre la base de una convención que no contempla las dinámicas humanas. Y como no volver a Hamlet, otro ejemplo paradigmático de una sociedad que oprime el individuo, forzandolo a decisiones en contra de su sentir racional. En este sentido, si bien el teatro isabelino está influenciado por la concepciónrenacentista que revalúa y explora el hombre en una nueva óptica, en la que cobra una posición central con respecto a la metafísica teocentrica medieval, la concepción del mismo constituye una rotura determinante del ideal de equilibrio renacentista. Dice Kott en “Los reyes”: “...El sol no gira alrdedor de la tierra y no existe el orden de las esferas, ni el orden moral. El rey no es el ungido de Dios yla política no es más que el arte de conseguir y mantener el poder...Es cruel el orden de la historia, amenazador el orden de la naturaleza, espantosas las pasiones que engendra el corazon humano”.

Lo que hace aún más tragica la condición humana es la conciencia del lo trágico que tiene el individuo ( retratada con ese lenguaje sublíme que hace de Shakespeare un poeta inegualuable ). Quizas...