Lacan

Señoras y señores: Dictar conferencias en el Nuevo Mundo ante un auditorio ávido de saber provoca en mí un novedoso y desconcertante sentimiento. Parto del supuesto de que debo ese honor solamente al enlace de mi nombre con el tema del psicoanálisis, y por eso me propongo

hablarles de este último. Intentaré proporcionarles en la más apretada síntesis un panorama

acerca de la historia, lagénesis y el ulterior desarrollo de este nuevo método de indagación y terapia.

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separaremos de ellos. En efecto, no esperen ustedes que las perspectivas del tratamiento

Si constituye un mérito haber dado nacimiento al psicoanálisis, ese mérito no es mío. (ver médico hayan de mejorar esencialmente para el enfermo por el hecho de que se le diagnostique nota)(2) Yo no participé en sus inicios.Era un estudiante preocupado por pasar sus últimos una histeria en lugar de una grave afección cerebral orgánica. Frente a las enfermedades exámenes cuando otro médico de Viena, el doctor Josef Breuer(3), aplicó por primera vez ese graves del encéfalo, el arte médico es impotente en la mayoría de los casos, pero el facultativo

procedimiento a una muchacha afectada de histeria (desde 1880 hasta1882). De ese historial tampoco sabe obrar nada contra la afección histérica. Tiene que dejar librados a la bondadosa

clínico y terapéutico nos ocuparemos; ahora. Lo hallarán expuesto con detalle en Estudios naturaleza el momento y el modo en que se realice su esperanzada prognosis. (ver nota)(5)

sobre la histeria [1895], publicados luego por Breuer y por mí. (ver nota)(4)

Entonces, pococambia para el enfermo al discernírsele la histeria; es al médico a quien se le

Una sola observación antes de empezar: no sin satisfacción me he enterado de que la mayoría produce una gran variación. Podemos observar que su actitud hacia el histérico difiere por de mis oyentes no pertenecen al gremio médico. No tengan ustedes cuidado; no hace falta una completo de la que adopta frente alenfermo crónico. No quiere dispensar al primero el mismo particular formación previa en medicina para seguir mi exposición. Es cierto que por un trecho grado de interés que al segundo, pues su dolencia es mucho menos seria, aunque parezca

avanzaremos junto con los médicos, pero pronto nos separaremos para acompañar al doctor reclamar que se la considere igualmente grave. Pero no es este el únicomotivo. El médico, que

Breuer en un peculiarísimo camino. en sus estudios ha aprendido tantas cosas arcanas para el lego, ha podido formarse de las

causas y alteraciones patológicas (p. ej., las sobrevenidas en el encéfalo de una persona

La paciente del doctor Breuer, una muchacha de veintiún años, intelectualmente muy dotada, afectada de apoplejía o neoplasia) unas representaciones que sinduda son certeras hasta

desarrolló en el trayecto de su enfermedad, que se extendió por dos años, una serie de cierto grado, puesto que le permiten entender los detalles del cuadro clínico. Ahora bien, todo su perturbaciones corporales y anímicas merecedoras de tomarse con toda seriedad. Sufrió una saber, su previa formación patológica y anátomo-fisíológica, lo desasiste al enfrentar lasparálisis con rigidez de las dos extremidades del lado derecho, que permanecían insensibles, y singularidades de los fenómenos histéricos. No puede comprender la histeria, ante la cual se

a veces esta misma afección en los miembros del lado izquierdo; perturbaciones en los encuentra en la misma situación que el lego. He ahí algo bien ingrato para quien tanto se precia

movimientos oculares ymúltiples deficiencias en la visión, dificultades para sostener la cabeza, de su saber en otros terrenos. Por eso los histéricos pierden su simpatía; los considera como

una intensa tussis nervosa, asco frente a los alimentos y en una ocasión, durante varias unas personas que infringen las leyes de su ciencia, tal como miran los ortodoxos a los

semanas, incapacidad para beber no obstante una sed...