MIS DIAS EN LA MAr

MIS DIAS EN LA MAR
Cuando era joven la mayor parte de mi vida la pasaba con mi padre en Mahahual, una pequeña población al sur de Quintana Roo. Desde los cinco años acostumbraba a estar en el mar desde que amanecía hasta que anochecía. Mi padre era pescador, a veces yo lo acompañaba. Llegábamos a una distancia donde las casas parecían hormiguitas, el mar se volvía más cristalino, los peces cadavez se volvían más hermosos.
Mi padre arrojaba las redes, seguidas de varias carnadas. Momentos después, debajo de la lancha se encontraban peces de hermosos colores, distintas formas y tamaños. Para mi padre yo era de mucha ayuda, puesto a que al enseñarme técnicas de pesca yo las aprendí muy bien, al poco rato sacábamos las redes, llenas de pescados de tamaños formidables, pues llenábamos cincocubetas de pescados. Nosotros no teníamos la necesidad de abastecernos del pescado, ya que éste lo consumíamos recién salido del mar.
Antes de regresar a tierra firme, salté de la lancha, “Un remojón no me hará mal” pensé; al rato cuando el sol estaba a punto de desaparecer partíamos hacia la playa. Llegábamos con los últimos rayos de sol, al atracar en la arena varias personas se nos acercaban,empezaban a platicar con mi padre acerca de la pesca, realmente no les ponía atención sólo entraba de nuevo al mar. Mi padre solía decirme que si no salía del agua mis dedos y mi piel se arrugarían, otros decían que yo era una sirena pues no había un segundo que no lo pasara en el mar. Yo nací en él, el mar y todo lo que habita en él es mi hogar.
Pasaron los días, mi padre salía a trabajar y yome hacía cargo de la casa pues yo era huérfana de madre. Y, aunque no la hubiese conocido yo la quería mucho al igual de como quería a mi padre y al mar. Terminada la jornada laboral mi padre llegó con un señor. En su cara se notaba su preocupación el señor con traje se fue después de tres horas, la cara de mi padre no cambió hasta la hora de acostarnos a dormir pues me dijo: “mañana te despiertasantes de las tres de la mañana”.
Obedecí a mi padre y antes de las tres estaba despierta y preparando el café, mi padre se despertó, se paró de la hamaca cogió una taza de café, suspiró, cerró los ojos y dijo “sac nite1 prepara los carretes, iremos a pescar”
“tan temprano” pregunté
“si, tan temprano” dijo para después tomar rumbo al baño preparé en una bolsa un almuerzo y en una mochila loscarretes y sedales. Dieron las tres y salimos yo no entendía lo que pasaba ¿Por qué salíamos tan temprano un domingo sin ir al mercado como todos los fines de semana? ¿Por qué de repente se notaba un aire extrañamente triste? Esas fueron las preguntas que me hice en todo el camino a la zona de pesca.
La luz de la luna nos rodeaba, la luz del faro nos indicaba donde estaba la costa. Mipadre paro de remar. Vimos el amanecer, fue el más bello amanecer que vi. Mi padre lanzaba las redes mientras que yo lo veía, supuse que no observo las nubes de tormenta pues lo notaba muy distraído. Arrojé las líneas con carnada.
1 sac nite: del maya flor blanca
Dieron las diez el sol no se notaba, sacamos las redes y las carnadas del agua, nos dirigimos a la costa más cercana, calculéque deberían faltar dos horas para llegar, “tenemos que hablar hija” dijo mi padre, “dime” respondí, “recuerdas al señor de anoche, era un abogado” hizo una pausa “tu madre cuando estaba viva trabajó mucho y te dejó una herencia, para tus estudios” mi padre se detuvo, su cara cambió por un instante, “sólo que si la recibes tienes que ir a Mérida a estudiar y vivirás con tu tía”“que…!!!! ¡Pero si yo no quiero ir! Quiero quedarme contigo y con el mar” le dije “lo sé, pero tienes que ir es por tu bien” dijo “pero yo no…”mi padre no me dejó terminar “PERO NADA, TE VAS A MEDIA SEMANA” gritó. Yo quería llorar “papá tu eres lo único que me queda…si de verdad me quieres, no dejarías que me vaya”, “no puedo hacer nada, está en el testamento”, me sentía mal estaba enojada....